Carlos Retamal
Los atacantes discutieron con la víctima, quien huyó en una moto. Lo siguieron en taxi y lo balearon en la puerta de su casa. Falleció en el Policlínico San Martín.
Carlos Retamal
Cerca de las 21 de este lunes 10 de mayo se produjo un nuevo homicidio en Rosario, el octavo en lo que va del mes. La víctima, de 21 años, recibió al menos un disparo cuando estaba entrando en su casa, ubicada en la zona oeste y murió en el Policlínico San Martín.
Según fuentes de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), poco antes de las 19 se produjo una discusión entre varios jóvenes en una esquina de la zona oeste. La disputa fue subiendo de tono y se presume que hubo hasta golpes, hasta que una de las personas salió corriendo, se subió a una moto que no le pertenecía y se fue a toda velocidad.
En base a testimonios recogidos en la zona por personal policial, al menos dos de las personas que también estuvieron en la pelea se subieron a un taxi y comenzaron a seguir al motociclista, efectuando disparos.
Al llegar al pasaje 1876 al 3500, a sólo dos cuadras del cruce de avenida Provincias Unidas y bulevar Seguí, el joven se bajó de la moto (una Honda Cg Titán de color roja), que dejó tirada sobre la vereda e ingresó corriendo a su casa.
Una versión señala que sus agresores se bajaron del taxi y le efectuaron varios disparos, antes de que el joven lograra ingresar en la vivienda. Tras esto, los atacantes huyeron en el taxi, mientras que el joven herido, identificado como Matías Ezequiel Ibañez, fue trasladado por familiares en un auto hasta el policlínico San Martín, ubicado unas 20 cuadras, donde ingresó en grave estado y murió mientras era atendido en la guardia.
Otra hipótesis que manejan los investigadores señalan que una de las dos personas que llegaron en taxi se bajó y siguió al joven hasta el interior de su casa y que la persecución siguió por los techos de varias viviendas de la cuadra, hasta que finalmente un disparo impactó en su torso y lo hizo caer. Tras esto, el atacante se subió al taxi y se dio a la fuga junto a su cómplice.
La fiscal en turno de la Unidad de Homicidios Dolosos, Marisol Fabbro, solicitó al gabinete criminalístico que tome testimonios a testigos y vecinos de la zona, realice un relevamiento de la escena del hecho y también del lugar donde se originó la pelea y que lleve a cabo un levantamiento de rastros, entre otras pericias. En inmediaciones de la vivienda de la víctima se secuestraron en la noche del lunes 3 vainas servidas calibre 9 milímetros, que fueron enviadas a peritar. Horas más tarde se llevó a cabo una nueva inspección en la calle y las viviendas de la zona, sin que se dieran a conocer los resultados de ese relevamiento.
Además, se ordenó que se verifique la existencia de cámaras de seguridad públicas y privadas que ayuden a dilucidar cómo fue la secuencia del hecho. Fuentes judiciales señalaron que se encontraron varias cámaras, cuyas imágenes serán analizadas en las próximas horas.
También se secuestraron dos teléfonos celulares, uno que podría pertenecer al autor material del ataque mortal, que estaría identificado y era intensamente buscado por personal de la Agencia de Investigación Criminal.