La dueña de un conocido bar de la localidad de Malargüe, al sur de Mendoza, fue detenida y trasladada a la penitenciaria, acusada de anestesiar a sus empleadas, inyectarles siliconas y obligarlas a prostituirse en su local bajo amenaza, informaron este martes fuentes judiciales.
De acuerdo a las denuncias recibidas, la mujer "anestesiaba a las chicas en su casa y les inyectaba siliconas en los pechos, para luego prostituirlas en su local bajo amenaza", se indicó desde el Ministerio Público Fiscal.
Hoy, bajo graves acusaciones penales, la propietaria de un local nocturno de Malargüe fue detenida y alojada en la penitenciaría. Es a raíz de hechos que investiga la fiscal Andrea Lorente, ocurridos el pasado 7 de enero, y que incluyen los delitos de "privación ilegítima de la libertad agravada por la violencia, lesiones leves y amenazas coactivas agravadas por el uso de arma de fuego".
A esos cargos, según se indicó, "se le suman otros encuadres penales que también son investigados como el "ejercicio ilegal de la medicina, lesiones graves dolosas, amenazas agravadas por el uso de arma y facilitación de la prostitución con ánimo de lucro".
Según consta en una de las causas que ahora investiga el Ministerio Público Fiscal, se trata de la dueña del bar nocturno ubicado en San Martín Sur y Anglat, en Malargüe, quien llevaba a su domicilio a las chicas que trabajaban en el lugar. Una vez allí, las anestesiaba y les colocaba siliconas en los pechos y las amenazaba para que no contaran que ejercían la prostitución en el bar.
Una de las mujeres tuvo serias consecuencias en su salud y se decidió a radicar la denuncia, tras la que se conoció que habría varias chicas en la misma situación, agregaron las fuentes.
Una vez que la fiscalía tomó contacto con la causa, la dueña del boliche fue imputada y posteriormente trasladada al penal, dado que ya pesaba sobre ella una condena de ejecución condicional.