Domingo 18.7.2021
/Última actualización 14:30
Un mozo de Comodoro Rivadavia fue detenido por haberse quedado con la tarjeta de crédito de un cliente y gastar cerca de 80 mil pesos en ropa. Si bien recuperó la libertad, quedó imputado y puede ser condenado. Además, fue despedido del restaurante donde trabajaba.
El episodio tuvo lugar el 15 de julio al mediodía cuando un hombre almorzó en el restaurante ubicado en las calles Rivadavia y Güemes, en el centro de la ciudad, y pagó la cuenta con una tarjeta de crédito. Aún se desconoce si se la olvidó o el mozo que lo atendió se la robó, pero lo cierto es que quedó en manos de este último, identificado como Elías Cruz, de 28 años.
El camarero utilizó el plástico para realizar dos grandes compras: una en una tienda de ropa local donde hizo un gasto de $ 62.300 y, minutos después, en un local de ropa para chicos por un monto de 16.050 pesos, según informó el medio El Patagónico.
La víctima comenzó a recibir mensajes en su celular por medio de la plataforma Mercado Pago donde le indicaban la acreditación de una compra y por ese motivo dio de baja la tarjeta en ese mismo momento. Luego, se dirigió al lugar desde donde le notificaron que había ocurrido la venta y preguntó a las empleadas del lugar. En ese mismo instante incluso, según testigos, el mozo ingresó al negocio por motivos que se desconocen y allí las empleadas lo identificaron y comenzaron a perseguirlo.
Gentileza El mozo tiene 28 años.El mozo tiene 28 años.Foto: Gentileza
En el caso tomó intervención la fiscal Andrea Serer que contó durante una audiencia judicial que Cruz fue detenido el mismo día del hecho cerca de las 19 cuando salía de hacer compras de uno de los locales cuando fue reconocido por el dueño de la tarjeta, que lo persiguió y alertó a la Policía, que finalmente lo detuvo.
Ante esa situación, la funcionaria judicial pidió que se declarara legal la detención por la situación de flagrante delito y lo procesó por ‘robo de quiebra real con fraude de tarjeta de crédito robada’, algo que tiene una pena de entre 1 y 6 años de cárcel. En ese sentido, el abogado del mozo exigió la liberación de su defendido.
Por su parte el juez Mariano Nicosia formalizó la apertura de la investigación y otorgó un plazo de seis meses para su ejecución. Además, autorizó el registro del auto del detenido, un Renault Kangoo, para recuperar las bolsas con la ropa que compró y dispuso que Cruz sea liberado mientras avanza la investigación.
Desde el restaurante donde el hombre se desempeñaba como mozo decidieron despedirlo inmediatamente una vez que se realizó la denuncia en su contra.