Barreda volvió a prisión en diciembre, cuando se le revocó su libertad en virtud de “serios riesgos” detectados en la convivencia con su pareja. Foto: DPA
La Justicia de Ejecución de La Plata comenzará a analizar si es viable otorgarle la libertad nuevamente al odontólogo.
Barreda volvió a prisión en diciembre, cuando se le revocó su libertad en virtud de “serios riesgos” detectados en la convivencia con su pareja. Foto: DPA
Télam
La Justicia de Ejecución de La Plata comenzará a analizar el lunes próximo si es viable otorgarle la libertad nuevamente al odontólogo Ricardo Barreda, condenado por asesinar a sus hijas, a su esposa y a su suegra en 1992, luego de que una mujer ofreciera su domicilio en la localidad platense de Olmos para que fije nueva residencia, informaron hoy fuentes judiciales.
El pedido para que Barreda quede libre fue realizado el 13 de este mes por su abogado, Eduardo Gutiérrez, y ahora será el juez de Ejecución platense Raúl Dalto quien analice la cuestión.
En diálogo con Télam, el magistrado explicó hoy que hasta el lunes no tomará ninguna decisión ya que está en feria judicial y se reintegra a su labor ese día. “Más allá de que este pedido haya sido presentado durante el mes de enero, no se han tomado medidas al respecto”, expresó Dalto, quien agregó que “la presentación puede ser viable pero primero se debe analizar tanto la propiedad como a la mujer que estaría en condiciones de aceptar a Barreda en su casa”.
El ofrecimiento fue realizado por una mujer misionera de la iglesia mormona de La Plata identificada como Sonia García (49). La mujer reside en una casa situada en la calle 173, entre 41 y 42 de Lisandro Olmos, La Plata, conoció a Barreda durante visitas que realizó en distintas oportunidades al penal y decidió ofrecerle su domicilio luego de que al odontólogo se le revocara la libertad porque ya no estaba en condiciones de residir con su mujer, Berta André, en su departamento del barrio porteño de Belgrano.
“Yo le abro mi casa a toda la gente de buen corazón que quiera venir. De entrada no desconfío de nadie y no juzgo a nadie por lo que hizo”, expresó García en diálogo con medios de prensa platenses. La misionera contó que como feligresa encontró su “lugar en el mundo” al visitar a personas detenidas.
“Empecé con la misión de visitar a la gente a la que de verdad le hace falta estar junto al espíritu de Dios”, dijo. Tras el ofrecimiento de la mujer y la presentación del abogado de Barreda para que pueda quedar nuevamente en libertad, un equipo de trabajadores sociales fue a inspeccionar el domicilio para hacer un estudio ambiental. Según fuentes judiciales, ese informe fue presentado el lunes último en el juzgado y se aguarda ahora la resolución judicial. Las mismas fuentes judiciales precisaron que se trata de una vivienda de dos dormitorios, living-comedor y unos 70 metros cuadrados. Barreda está preso desde diciembre último, cuando el juez Dalto revocó su libertad en virtud de “serios riesgos” detectados en la convivencia con su pareja, Berta André, quien padece algunos problemas neurológicos.
Si bien para acceder a la libertad el odontólogo no necesita una garante, sí debe aportar un domicilio de residencia para estar ubicable y poder ser seguido de cerca por el Patronato de Liberados.