Raúl González tiene 53 años y es empleado de una conocida inmobiliaria de la ciudad. A principio de mes, delincuentes le sacaron aproximadamente 45 mil pesos de su cuenta bancaria.
La semana pasada, se conoció el caso de un mozo santotomesino al que le quitaron sus ahorros. Ahora, trascendió que un empleado de una inmobiliaria santafesina sufrió un incidente similar. Las víctimas creen que nadie está investigando sus casos.
Raúl González tiene 53 años y es empleado de una conocida inmobiliaria de la ciudad. A principio de mes, delincuentes le sacaron aproximadamente 45 mil pesos de su cuenta bancaria.
La víctima se percató del saqueo el 1° de julio pasado. No había cobrado el sueldo aún, pero tenía dinero en la cuenta porque acababan de depositarle el aguinaldo. No obstante, al ingresar al homebanking se encontró con apenas 240 pesos. Incrédulo, buscó el listado de los últimos movimientos y así descubrió que la plata se había esfumado por seis pagos electrónicos, uno de ellos -el mayor- a una conocida tarjeta de crédito de la que no es cliente. Inmediatamente bloqueó su tarjeta de débito, reclamó en le banco e hizo la denuncia en la Comisaría 6a.
"En el banco le dijeron que para ellos él había hecho los pagos y que era mi marido quien tenía que demostrar que no era así. Actuaron mal en el banco. Deberían tratar mejor a sus clientes. Entonces, fuimos a la tarjeta de crédito y cuando planteamos el caso, nos dijeron que no podían darnos los datos de adónde había ido a parar el dinero, que iban a mandar la respuesta por correo electrónico, pero todavía estamos esperando", se quejó Silvina Schumaker, esposa de la víctima..
"Nos sentimos desamparados, violentados -agregó la mujer-. Es una violación a tu caja de ahorro, a tu sueldo. Fuimos a todos lados, pero en ningún lugar nos dieron una respuesta, ni en la comisaría, ni en el banco, ni en Defensa del Consumidor ni en el Ministerio Público de la Acusación".
El caso es muy similar al sufrido por Roberto Carlos Villalba, un mozo santotomesino al que días atrás le hicieron desaparecer de su cuenta los 22 mil pesos que tenía ahorrados. Al igual que él, González no encuentra explicación de cómo pudieron los ladrones vulnerar el sistema para vaciar la cuenta. "Acá no hubo cuento del tío, nada de eso. Somos cuidadosos con las tarjetas y ahora más. No hubo llamados, sólo algunas compras por Internet, pero siempre a través de páginas serias. El tema es que de algún lado se robaron los datos de la tarjeta de débito. Uno empieza a desconfiar, del que te atendió en un restaurante, del que te cargó nafta. El mayor problema es que nadie está investigando, no sabemos nada de nada", Se lamentó Silvina.