Fue una verdadera noche de furia la que se vivió en Alto Verde y que dejó un saldo aterrador: un adolescente muerto a tiros; varios colectiveros asaltados y el intento de incendio de una vivienda.
Un adolescente fue asesinado a tiros. Tres colectiveros asaltados. Intentaron incendiar una vivienda.
Fue una verdadera noche de furia la que se vivió en Alto Verde y que dejó un saldo aterrador: un adolescente muerto a tiros; varios colectiveros asaltados y el intento de incendio de una vivienda.
La secuencia se inició cerca de las 5 en la manzana 3 del distrito costero, más precisamente en el pasaje 16.
A esa hora dos adolescentes llegaron hasta un kiosco con la intención de comprar algunas bebidas. Sin embargo en cuestión de segundos todo se transformó en un pandemónium.
Es que desde las sombras aparecieron varios sujetos, los que atacaron a tiros a los jóvenes. Uno de los disparos pegó en el cuerpo de Lucas Gabriel Grandoli, de 16 años, quien cayó al suelo herido de muerte.
Segundos después se generó un intercambio de fuego entre varios individuos que estaban a las corridas.
A esa altura varios llamados telefónicos alertaron a la policía sobre lo ocurrido, motivo por el cual varios patrulleros acudieron al lugar.
No obstante ni bien llegaron, los uniformados fueron recibidos con una lluvia de proyectiles.
Así y todo lograron cargar al chico baleado en uno de los patrulleros y salieron raudos en dirección al hospital Cullen donde, pese a los esfuerzos realizados, se produjo su fallecimiento.
Mientras, otros pesquisas intentaban recabar datos y preservar la escena del crimen. Sin embargo el trabajo debió ser interrumpido cuando dos malvivientes aparecieron en escena y, sin aviso previo, lanzaron un furibundo ataque a tiros contra los actuantes.
En principio los oficiales intentaron detenerlos. Pero para evitar males mayores decidieron replegarse, cubrirse detrás de los vehículos y efectuar algunos disparos con cartuchos (de goma) antitumultos.
A todo esto los propios vecinos se sumaron a la agresión y comenzaron a arrojar proyectiles contra los uniformados que retrocedieron a una zona segura.
No obstante, los incidentes no terminaron allí. Es que en medio de los disturbios varios rufianes aprovecharon para asaltar a colectiveros de la Línea 13 (ver nota relacionada).
Recién a media mañana, los investigadores pudieron ingresar a la zona crítica para proceder con sus labores de rigor.
Tres colectiveros asaltados; uno golpeado
Dicen que a río revuelto...
En momentos que la policía estaba siendo atacada en la manzana 3, por vía radial se lanzó el pedido de colaboración.
Los primeros que acudieron en auxilio fueron agentes de Prefectura que estaban custodiando la parada de colectivos de la Línea 13.
Dicha situación fue aprovechada por varios malvivientes que, al advertir que el lugar había quedado sin vigilancia, asaltaron a tres choferes.
A punta de pistola los rufianes despojaron de dinero y de sus teléfonos celulares a los trabajadores. Incluso uno de ellos resultó lesionado como consecuencia de un “culatazo” que le pegaron en la nuca.
Humo de marihuana
Los graves incidentes de Alto Verde están atravesados por el humo de la marihuana. Es que el principal sospechoso de haber dado muerte al chico Grandoli, es un tenebroso “personaje” vinculado al submundo narco. Los lugareños lo señalan como uno de los que “baja merca y yerba” para luego venderla en distintos sectores del barrio.