Horacio Borda, el parrillero herido tras intentar separar una pelea entre punteros políticos, salió este miércoles de terapia intensiva y pasó a sala intermedia del hospital José María Cullen.
Su familia organiza una venta de empanadas para solventar gastos y el lunes convocaron a una marcha a Tribunales para pedir avances en la causa.
Horacio Borda, el parrillero herido tras intentar separar una pelea entre punteros políticos, salió este miércoles de terapia intensiva y pasó a sala intermedia del hospital José María Cullen.
"Hoy apenas abrió los ojos, nos conoció, lloró un poquito y volvió a dormirse", contó en diálogo con El Litoral Luciana Díaz, esposa del dueño del local ubicado en el norte de la ciudad.
No obstante, aclaró que "hay que seguir esperando", ya que los médicos "quieren que esté bien despierto para poder evaluar qué secuelas tiene".
Para solventar los gastos que generan la internación, su familia organiza una venta de empanadas. "Después de lo que pasó, la gente ya no viene como antes. El lugar quedó 'quemado'", lamentó Díaz.
Al ser querellante en la causa, la mujer se tiene que presentarse en los Tribunales de Santa Fe el próximo lunes. Para esa ocasión, los allegados a Borda organizan una marcha. "Quiero que la gente esté afuera porque no hay avances", explicó Luciana.
"Mi abogado quiso pedir informes y desde la fiscalía no le dieron nada", agregó.