El estadio del Club Victoria, institución fundada en 1897 en la zona sur de Concordia, fue epicentro de un nuevo capítulo de violencia en el fútbol concordiense.
Todo ocurrió mientras se disputaba un partido de la cuarta fecha de la copa. La violencia comenzó dentro de la cancha y se extendió. La Policía disparó y los profesionales debieron ser trasladados al hospital.
El estadio del Club Victoria, institución fundada en 1897 en la zona sur de Concordia, fue epicentro de un nuevo capítulo de violencia en el fútbol concordiense.
En un partido disputado por la cuarta fecha de la Copa “Estadio Ciudad de Concordia”, Libertad superó 2 a 1 a Club Social Cultural Villa Zorraquín.
El “Lobo” dio vuelta el resultado durante el tiempo de descuento, luego de haberlo empatado a los 43 minutos del segundo tiempo.
Tras el gol del triunfo la parcialidad de Zorraquín se mostró descontenta y los jugadores se habrían enojado, según los presentes, por señas que el árbitro hizo al dar el silbatazo final. Luego de ese pitido empezaron los golpes.
Cuando todo se salió de control, hubo balas de goma por parte de la Policía, algunas de las cuales impactaron en dos de los periodistas presentes en la cancha; además de golpes de puños, patadas y momentos de zozobra.
Sergio “El Tota” Ferrari fue uno de los afectados: recibió el impacto de 4 balas de goma. Un colega suyo, Roque Gaitán, también se vio afectado por una bala de goma que rebotó en una chapa y terminó golpeándolo en la zona del rostro, en un lugar cercano a un ojo.
Además, en los videos que circulan en redes sociales se puede observar cómo un futbolista de Villa Zorraquín, identificado con el número 18, golpeó y tiró al suelo al entrenador de arqueros del “Lobo”, que tiene una pierna ortopédica.
Los hechos se dieron a pocos meses de que hubiera un parate en el fútbol concordiense por la violencia en las canchas. Durante la semana, definirán cómo sigue la actividad.