Bomberos, ambulancias y policías confluyeron este jueves, cerca del mediodía, en inmediaciones de donde la Peatonal San Martín se cruza con calle Mendoza, en la zona céntrica de la ciudad de Santa Fe.
Se tratan de dos incidentes que aparentemente no tienen vinculación entre sí.
Bomberos, ambulancias y policías confluyeron este jueves, cerca del mediodía, en inmediaciones de donde la Peatonal San Martín se cruza con calle Mendoza, en la zona céntrica de la ciudad de Santa Fe.
Ocurrieron allí dos incidentes que aparentemente no tienen vinculación entre sí.
En primer lugar, dentro de una conocida galería una colilla de cigarrillo mal apagada y arrojada en un cesto de basura desató un incendio en un cuarto lleno de tarros de pintura y otros elementos inflamables.
La cosa no pasó a mayores porque los comerciantes del lugar se apresuraron para apagar las llamas -que alcanzaron un tamaño importante- con sus extintores.
Una dotación de la Agrupación de Bomberos Zapadores llegó hasta el lugar y se cercioró de que todo había sido debidamente controlado.
Por otra parte, un equipo de emergencias del servicio público de salud apareció en la escena y brindó asistencia a algunos locatarios que sufrieron consecuencias leves por la inhalación de humo.
Prácticamente en el mismo momento que esto ocurría un joven pasó corriendo por esa cuadra de la peatonal. Se trataba de un muchacho que habitualmente deambula por la zona. "Es un trapito que apareció no hace mucho", contó un comerciante.
Este sujeto, que estaba armado con una larga "chuza", irrumpió violentamente en un bar ubicado en la esquina que forman las calles San Martín y Mendoza.
Un mozo forcejeó con él y logró sacarlo nuevamente a la vereda, tras lo cual cerró la puerta. Fue entonces que el joven pateó con fuerza la abertura.
Todo terminó cuando aparecieron dos policías de la Brigada Motorizada que aparentemente venían tras los pasos del delincuente, que rápidamente fue esposado.
Los uniformados le secuestraron el arma blanca que llevaba, una faca de 19 centímetros de largo.
Las actuaciones prosiguen en dependencias de la Comisaría 1a. Trascendió que los agentes motorizados estaban persiguiendo al sospechoso, por denuncias de que había provocado desmanes en otro comedor cercano, donde amenazó con su chuza a empleados y clientes.
Comerciantes de la zona se quejaron por la frecuencia de este tipo de incidentes. "Son cuidacoches o vendedores ambulantes que cada tanto se agarran a piñas, piedrazos o chuzazos", contaron.
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