Un fiscal de Rosario pidió hoy que se condene a la pena de 7 años y 6 meses prisión al jefe de la narcobanda “Los Monos”, Ariel Máximo “Guille” Cantero, por presunta coacción agravada cometida mediante un llamado telefónico amenazante que hizo desde una cárcel a un juez del que pretendía un traslado de lugar de detención, informaron fuentes judiciales.
“Decile que se meta el traslado ya sabe dónde y que lo voy a matar”, dijo el fiscal Fernando Dalmau, que fueron las palabras pronunciadas por “Guille” Cantero desde la cárcel de Rawson (Chubut) el 19 de agosto de 2016, dirigidas a un juez de Sentencia.
En la primera audiencia de las dos previstas para el juicio oral, el fiscal solicitó hoy en su alegato de apertura una pena de 7 años y 6 meses de prisión para Cantero y la declaración de reincidencia, atento a que ya posee cuatro sentencias condenatorias.
La defensa de Cantero, a cargo del abogado Fausto Yurure, le planteó al tribunal unipersonal integrado por el juez Pablo Pinto, que las palabras de Cantero constituyen cuanto mucho “un enojo” pero nunca “una coacción”, por lo que pedirá su absolución.
Según la acusación, ese día del invierno de 2016 Cantero llamó en dos oportunidades al despacho del juez de Sentencia 3 de Rosario, Edgardo Mario Fertitta, quien tenía que resolver un traslado solicitado por su defensa, para ser alojado en una penitenciaría de la provincia de Santa Fe.
En la investigación se determinó que ambas llamadas fueron realizadas desde el teléfono público del pabellón 8 Sector “B” del Instituto de Seguridad y Resociabilización de Rawson.
Las cámaras de seguridad del penal muestran a Cantero en el teléfono al mismo horario que se registraron las comunicaciones.
La primera fue las 12.28 y habló con una secretaria del Juzgado, ante quien se identificó como “Cantero”, pero la empleada le dijo que el magistrado no se encontraba.
“Guille” insistió 12 minutos después “dejando un mensaje intimidatorio con amenazas de muerte, exponiendo ocasionar un mal grave y futuro siendo en este caso un daño físico a la persona de dicho magistrado”, informó el Ministerio Público de la Acusación (MPA).
“Te dejo este mensaje. Decile que se meta el traslado ya sabe dónde y que lo voy a matar”, dijo “Guille”.
Durante la audiencia de hoy declararon seis testigos, entre ellos la empleada que recibió el llamado y el juez Fertitta, quien dijo que se atemorizó cuando supo del contenido de la llamada telefónica.
Yrure, el defensor de Cantero, dijo a Télam tras la audiencia que en su teoría del caso “esto se dio en un contexto adonde Cantero estaba a 1.500 kilómetros de Rosario cuando la causa tramitaba acá, que insistentemente habíamos pedido que volviera y se estaban tramitando los traslados”.
Para el defensor, los dichos de su cliente “no constituyen una amenaza, no estaba en su intención, fueron producto del enojo y la frustración” ante la negativa del traslado.
Puntualizó que desde su punto de vista no existe coacción, que fue la figura escogida por el fiscal, “porque hacía tres días le habían notificado que no se haría el traslado”, por lo que no buscaba condicionar al juez.
Cantero fue condenado en abril de 2018 a 22 años de prisión como organizador de una asociación ilícita y autor de homicidio, por la Justicia ordinaria de Santa Fe.
El 6 de diciembre de 2018 fue penado a 15 años de reclusión por tráfico de estupefacientes en la Justicia Federal rosarina, que en octubre de 2019 lo condenó a 10 años de cárcel por un secuestro extorsivo.
En diciembre del año pasado recibió su cuarta sentencia, esta vez a 7 años de cárcel, en otra causa por comercio de estupefacientes.
El juicio oral por coacción agravada que lo tienen como protagonista se reiniciará el próximo lunes, cuando se produzcan los alegatos finales y el tribunal fije la fecha de lectura de la sentencia, precisaron voceros judiciales.