Un policía santafesino quedó en prisión preventiva luego de que agrediera repetidas veces a su expareja. Así lo ordenó el juez Lisandro Aguirre, tras corroborar la existencia de riesgos procesales.
El juez dispuso que lo analice la Junta de Salud Mental.
Un policía santafesino quedó en prisión preventiva luego de que agrediera repetidas veces a su expareja. Así lo ordenó el juez Lisandro Aguirre, tras corroborar la existencia de riesgos procesales.
La mujer denunció golpes, amenazas con un cuchillo e incluso señaló que el dijo que la prendería fuego. La fiscal Milagros Parodi -de la Unidad de Violencia de Género, Familiar y Sexual- intervino y ordenó la detención del uniformado.
Marcelo Fabián Martínez fue imputado como autor de "lesiones leves dolosas agravadas por el vínculo y por haber sido cometidas por un hombre contra una mujer, mediando violencia de género", "amenazas calificadas" y "amenazas simples".
Durante la audiencia en la que se solicitó la prisión preventiva, la víctima declaró sentir miedo ya que una de las amenazas del policía fue que si quedaba preso por su culpa, cuando recuperara la libertad la mataría. La fiscal señaló que en el caso están presentes "todas las pautas de alarma".
Martínez contó con la representación de la defensora pública Leticia Feraudo, quien solicitó medidas alternativas. A pesar de esto, el juez Aguirre consideró necesaria la imposición de la cautelar de máxima y, además, ordenó que el imputado sea evaluado por la Junta de Salud Mental.
Parodi señaló que el policía se encuentra pasado a disponibilidad desde enero, debido a un incidente mientras prestaba servicio en Rosario. Por este motivo, le retiraron el arma de fuego reglamentaria.
Respecto a los hechos por los que fue detenido, la fiscal indicó que "alrededor de las 9:00 de la mañana del sábado pasado, el imputado amedrentó a su expareja mientras estaban en una vivienda ubicada en Vera al 4.200. Mientras la insultaba, le mostró un cuchillo y le expresó su intención de hacerle daño".
En tal sentido, aclaró que "la víctima logró quitarle el arma blanca y arrojarla al suelo". Luego, "el policía tomó del cabello a la mujer, la arrastró por el piso, la pateó en la espalda y ejerció presión sobre su cuello". Como consecuencia, ella resultó herida en diferentes partes del cuerpo.
"Si bien el hombre investigado se retiró del inmueble después de la situación violenta, vio que la víctima se dirigía a una subcomisaría para denunciarlo y la amedrentó para que no lo delatara". Al respecto, la fiscal remarcó que en ese momento le dijo que "iba a prenderla fuego" y que "si quedaba preso, la mataría al recuperar la libertad".
En la audiencia la fiscal también afirmó que "días antes, el imputado había amenazado a su expareja con quitarle la vida", y especificó que "esa intimidación había sido a través de WhatsApp".
Por todo esto, y tras corroborar la existencia de riesgos procesales, el juez Aguirre ordenó que el policía permanezca tras las rejas.