Danilo Chiapello
Agentes del Comando Radioeléctrico reparten juguetes y hacen donaciones en barrios carecientes e instituciones de bien público.
Danilo Chiapello
dchiapello@ellitoral.com
Para todos ellos la palabra acción es mucho más que un concepto.
De repente pueden estar en un incendio y a los 5 minutos tendrán que asistir a una mujer a punto de dar a luz. Luego tomar intervención en un tiroteo. Y después investigar un robo. Y así... cada uno de los sucesos se irán encadenando durante todo el día sin descanso.
Pero una vez que las pulsaciones bajan, las cuestiones más sensibles y elementales llegan también a los corazones de estos hombres y mujeres que pertenecen al Comando Radioeléctrico, de la Unidad Regional I.
Entonces lo que comenzó como una tímida idea fue tomando cuerpo hasta transformase en una acción directa, en favor de los más necesitados.
Ayuda directa
“Esto fue una iniciativa que surgió entre los compañeros hace tres años. Nosotros estamos haciendo campañas de juguetes para el hospital de Niños; para la escuela de Santa Rosa de Lima (Fundaniños) y la iglesia de barrio Chalet”, explicó la oficial María Paula Aranda.
“El año pasado se sumó el hogar de ancianos de la Ley 5.110, donde a los abuelos les llevamos todos elementos necesarios para su higiene personal y demás.
Hace dos semanas surgió la idea de ayudar a la Casita de las Madres (del hospital de niños, Orlando Alassia) con tapitas.
“Ocupamos buena parte del patio con las bolsas de tapitas que juntamos con el personal del Comando”, prosiguió Aranda, una de las organizadoras de la donación. “Posteriormente, las tapas serán vendidas a empresas recicladoras para así recaudar fondos que serán destinados a solventar el funcionamiento del alojamiento”, explicó.
Y este fin de semana, Aranda junto a sus camaradas se trasladaron hasta la comunidad Com.Caia de Recreo, donde repartieron juguetes a los más chicos por el Día del Niño.
Si bien nosotros no tenemos un sueldo que sea muy importante, de todos nosotros nació la idea de poner un poquito para llevarles un regalito a los chicos de la comunidad indígena de Recreo.
Tomó parte personal del Comando, también de la Secretaría General, se juntaron muchísimos juguetes y pudimos cumplir con la misión de que todos los chicos de esa comunidad tengan un juguete en su día.
Mirada distinta
“A mí me enorgullece como persona este tipo de cosas. Y también como policía, porque la gente muchas veces tiene una mirada distinta sobre nosotros. Y este tipo de hechos marca la diferencia”, reflexionó Aranda.
“La gente indígena, como así también en el hospital o en barrio Chalet o en la escuela, jamás espera que llegue un móvil policial lleno de juguetes para repartir.
Agradezco a mis jefes también que permiten este tipo de gestiones y facilitan los medios, y por supuesto a todos los compañeros que se sumaron para colaborar de manera desinteresada.
Orgullo personal
Por su parte Iván Leiva (jefe del Comando Radioeléctrico) sostuvo que “estoy orgulloso y contento de contar con un personal que se muestra preocupado y comprometido con la necesidad social”.
“Este tipo de actividades nos significa salir un poco del stress al que estamos sometidos a diario con nuestro trabajo. Me siento muy contento y a la vez orgulloso por el personal a cargo”.
En tanto Hérnan Ferrero (jefe de la Agrupación Cuerpos) elevó “felicitaciones a ellos dos por la iniciativa y a todos los que participaron. Siempre acercarse a la comunidad es bueno para todos”.
Navidad
“El 15 de noviembre ya se empieza a recolectar una nueva partida de juguetes para Navidad”, informaron.
Todos los que se quieran sumar son bienvenidos. Hay una página en Facebook que se llama “Un juguete una sonrisa”. El que quiera ver lo que se hace, puede entrar a la página y revisar. Todo irá para el hospital, los hogares y las escuelas. Mientras a más lugares lleguemos, mejor será”, concluyeron.