Redacción El Litoral
Redacción El Litoral
sucesos@ellitoral.com
Un hombre de 67 años, que sólo fue identificado con sus iniciales Z.R.S., quedó en prisión preventiva en el marco de una investigación por delitos contra la integridad sexual de cuatro niñas menores de edad, tres de ellas sus propias nietas, en la que intervienen los fiscales Federico Grimberg y Mariela Jiménez. El juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Sergio Carraro, dispuso que el acusado permanezca tras las rejas, a raíz del pedido formulado por la Fiscalía en una audiencia de medidas cautelares celebrada en los tribunales de la ciudad de Santa Fe.
Previamente, los fiscales Grimberg y Jiménez atribuyeron los hechos al imputado en distintas audiencias realizadas, luego de que las niñas junto a sus representantes legales hicieron las correspondientes denuncias.
Con relación a las tres niñas que son nietas del imputado, Grimberg y Jiménez le endilgaron la autoría de los delitos de abuso sexual simple gravemente ultrajante calificado (por el vínculo y por aprovechar la situación de convivencia preexistente con las víctimas menores de 18 años) y en reiteradas oportunidades.
En tanto, por lo ocurrido con la niña que no es familiar del hombre investigado, los fiscales del MPA le atribuyeron a Z.R.S. tres hechos, por los cuales le imputaron la autoría de abuso sexual con acceso carnal agravado (por resultar un grave daño en la salud física o mental de la víctima) y abuso sexual gravemente ultrajante agravado (también por resultar un grave daño en la salud física o mental de la víctima).
Los delitos fueron imputados en concurso real y en concurso ideal con promoción a la corrupción de menores calificada (por mediar violencia, intimidación o coerción).
En su casa
“Todos los abusos fueron consumados en la casa en la que vivía el imputado junto a su esposa, ubicada en jurisdicción de Colastiné”, informaron los fiscales. “Se trata de hechos que generan un real sometimiento y humillación en las víctimas”, sostuvieron.
Los fiscales también argumentaron que “la diferencia de edad entre el imputado y las niñas; el parentesco que une al hombre investigado con tres de las cuatro víctimas; la corta edad de las menores, tienen entidad suficiente para adelantar el libre y normal desarrollo de la sexualidad de las niñas”. En tal sentido, indicaron que “también tuvimos en cuenta la modalidad, frecuencia y duración de las agresiones sexuales”.