El novio de la estudiante universitaria que el 15 de marzo último murió tras caer del cuarto piso de un edificio en el barrio porteño de Nueva Pompeya fue procesado hoy con prisión preventiva, luego de que la justicia considerara el hecho como un femicidio y descartara la versión del acusado, quien había dicho que ella misma se había arrojado por el balcón.
Fuentes judiciales informaron que el fallo de la jueza en lo Criminal y Correccional 51, Graciela Angulo de Quinn, recayó sobre Patricio Leonel Reynoso (31), a quien le imputó el delito de “homicidio calificado” en perjuicio de Pilar Lucía Riesco (21), misma calificación que impulsó el fiscal de la causa, Martín López Perrando.
De acuerdo a los voceros, fueron determinantes para calificar el hecho como un femicidio los resultados que surgieron de la autopsia al cuerpo de la víctima y los estudios médicos forenses al imputado.
“Si bien la autopsia reveló que la causa de la muerte fue un traumatismo de cráneo producto de la caída, en ella se advirtieron signos de defensa, como amarraduras en los brazos”, explicó una fuente con acceso al expediente.
El mismo pesquisa detalló que en la superficie corporal del acusado se hallaron “rasguños, que son signos de la defensa ejercida por la víctima”.
Además, la jueza ordenó en su fallo que le remitan a la brevedad los resultados de los peritajes complementarios a la autopsia, como los histopatológicos, y el informe del segundo relevamiento realizado en el departamento donde ocurrió el hecho.
De esta manera, los investigadores descartaron en esta etapa de la instrucción la versión que dio el imputado al ser indagado dos días después de la muerte de su novia, ocurrida alrededor de las 16.30 del domingo 15 de marzo último, cuando cayó del balcón del departamento "E" del cuarto piso de la calle Alagón 305, en Nueva Pompeya.
En aquella oportunidad, el acusado dijo que se trató de un suicidio, que primero discutieron y luego ella fue hasta el balcón se tiró en tres movimientos: sentó en la baranda, luego pasó una pierna, después la otra y se lanzó.
Según el investigador consultado, Reynoso, de profesión comerciante, contó que la noche del sábado 14 la pareja regresó al departamento, que allí fumaron algo de marihuana -fue secuestrada esa droga en la vivienda-, y que él a las 2 de la madrugada decidió irse a bailar solo.
Siempre según las fuentes, Reynoso dijo que regresó a las 8 de la mañana, se acostó a dormir y cuando se despertó alrededor de las 14 del domingo, comenzó una discusión prolongada que escucharon varios vecinos que ya declararon en el expediente.
El imputado afirmó que Riesco comenzó a increparlo, a gritarle, a decirle que no la quería, que incluso en un momento le arrojó un portarretrato con una foto de ellos y que luego fue al balcón y se tiró al vacío.
A su vez, la defensa de Reynoso presentó luego de la indagatoria un pedido de excarcelación, pero luego de que el fiscal se opusiera, la jueza lo rechazó al considerar, entre otros elementos, que podría alterar evidencia en su departamento, que quedó preservado para la pesquisa.
Las fuentes reiteraron que por los testimonios de familiares y amigos ya recolectados, la pareja tenía una “relación tóxica” y problemas de adicciones.
Incluso, a Reynoso, le figura como antecedente penal una “probation” en el juzgado federal porteño de Daniel Rafecas.
Si bien no existían denuncias previas de la joven contra su novio por violencia de género, Reynoso había sido filmado en abril del año pasado atacando a palazos a un colectivo tras un problema de tránsito y esas imágenes se viralizaron por las redes sociales.
Al momento del crimen, Riesco cursaba la carrera de Recursos Humanos en la Universidad de la Marina Mercante y trabaja en una entidad bancaria.