Lunes 31.8.2020
/Última actualización 19:43
La Justicia dictó este domingo la prisión preventiva para Gabriel Exequiel Gallay (25) por el crimen de Adriana Estefanía Holzinger Bonetto, la mujer trans asesinada en febrero de 2018, en San José del Rincón. A dos años y medio de su muerte, la investigación señaló al recientemente detenido como el posible autor del femicidio.
La causa está en manos de la fiscal Ana Laura Gioria, de la Unidad Especial de Homicidios, quien arribó a la audiencia imputativa realizada el viernes pasado acompañada por el Fiscal Regional de Santa Fe, Carlos Arietti. Ante la jueza Rosana Carrara, atribuyó al joven la autoría de los delitos de "homicidio calificado por el vínculo y por ser cometido por un hombre en contra de una mujer mediando violencia de género (femicidio)" y "hurto calificado de vehículo cometido con llave verdadera sustraída", en concurso real.
Este domingo, e juez Rodolfo Mingarini ordenó la prisión preventiva para el imputado, que contó con la asistencia técnica del abogado Iván Leguiza.
"En la audiencia el juez Mingarini dio por acreditado el planteo que hicimos desde la Fiscalía acerca de los riesgos procesales y ordenó la medida cautelar privativa de la libertad", sostuvo la fiscal Gioria. Además, la funcionaria del MPA valoró que "el magistrado entendió que es correcta, en esta instancia procesal, las calificaciones penales que atribuimos al imputado, como así también las agravantes".
Adriana murió la madrugada del 8 de febrero de 2018 en su casa de calle Juan de Garay sin número del barrio Los Espinillos de Rincón. Fue agredida con un arma blanca que le provocó múltiples heridas de tipo punzo cortantes en su cuerpo, generando que falleciera en el acto.
Gallay y Adriana eran pareja. Su muerte "se circunscribe en un contexto de violencia de género evidenciado en la modalidad comisiva y la especial saña desplegada por el imputado", explicó Gioria. "Luego de haber dado muerte a Holzinger Bonetto, el imputado se fue del lugar en una moto que era propiedad de la víctima", agregó.
"La investigación nunca se detuvo y fuimos ordenando diversas medidas que permitieron lograr la detención" del acusado, comunicó la representante del MPA. "Durante los dos años de investigación se realizaron diversas diligencias: se llevaron a cabo estudios genéticos, se peritaron teléfonos celulares, se concretaron allanamientos, se tomaron numerosas testimoniales y se analizaron imágenes de cámaras de seguridad y perfiles de redes sociales".