El Litoral
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A un mes de la muerte de Fabricio Echagüe, su padre Miguel Ángel denunció los beneficios que ofrece el sistema carcelario para las tres personas que están imputadas por el delito de homicidio. No habían pasado dos semanas del asesinato de su hijo que aparecieron en la red social Facebook imágenes con los presos a punto de comer un suculento asado dentro del penal más importante de la provincia.
“Estas tres personas están presas en Coronda y lo que yo me pregunto es por qué tienen tantos privilegios en la cárcel, a ver quién me da una explicación”, cuestionó el hombre, dolido porque mientras él y su familia hacen el duelo, los lugares de encierro previstos para quienes violan la norma son utilizados como centros de diversión.
Miguel Ángel Echagüe tiene 58 años, es jubilado de la Policía y vive junto a su familia en barrio San Lorenzo. La muerte de su hijo fue presentada en las primeras horas como una disputa entre las barras bravas de los clubes Colón y Unión, pero esa versión fue perdiendo fuerza con el paso del tiempo.
Otro crimen
Sí se constató que los imputados son conocidos y temidos miembros de la barrabrava del club del barrio Centenario y que en reiteradas oportunidades han estado en la mira de la Justicia por hechos delictivos. Sin ir más lejos, dos de ellos están acusados de matar a Nahuel Romero el 16 de febrero del año pasado, casi en el mismo lugar donde mataron a Echagüe.
La cuadra de Tarragona al 600 del barrio Centenario lleva la marca de dos crímenes recientes. En el de Romero, un chico de 17 años que fue gravemente herido el 16 de febrero de 2014 y agonizó dos semanas hasta su muerte, fueron acusados Marcos “Pitu” Leiva (29) y el “Orejón” Marcelo Caparelli (27). Ambos estuvieron detenidos con prisión preventiva, pero fueron liberados por un fallo de la Cámara de Apelación Penal.
El mes pasado fueron nuevamente aprehendidos, sumado a Miguel Orlando “Nano” Leiva, de 40 años, todos imputados por el homicidio de Echagüe, que recibió al menos tres impactos de bala a corta distancia en la boca del estómago.
Cosa de mujeres
“Este miércoles se cumplió un mes de la muerte de mi hijo, que lo mataron en el Centenario, en calle Tarragona al 600. Lo que yo sé es que hubo una disputa entre mujeres y mi hijo estaba adentro de la casa cuando le avisan de la discusión y sale a separar para que no se peleen y empieza el problema con el Nano Leiva, Pitu Leiva y el Orejón Caparelli”, relató hoy Miguel Ángel.
Como dos de los detenidos también terminaron heridos de bala, se habló de un enfrentamiento, no obstante lo cual el papá de Echagüe desmiente esa versión: “Ellos dicen que el pibe mío es el que empieza a tirar, e incluso dicen que tiraba con dos armas. Mi hijo fue a separar, lo de las armas es todo mentira, no tuvo ningún arma. Cuando se mete a separar lo agarran del cuello y le pegan los tiros en el estómago”.
Entrevista con Pablo Cococcioni, Director Servicio Penitenciario