Fijación de domicilio, presentarse ante el Ministerio Público de la Acusación mensualmente y la prohibición de salir del país. Esas son las tres medidas que se le impusieron este jueves al empleado del Hospital Iturraspe de Santa Fe imputado por una estafa cuyo monto, actualizado, supera los 100 millones de pesos.
Se trata de Jorge Alberto Carnaghi, de 51 años, a quien el fiscal Federico Grimberg investiga como autor de "estafas" y coautor de "organización y explotación de juegos de azar no autorizados con fines de lucro". Tanto él como el resto delos empleados imputados se encuentran con un sumario administrativo iniciado y fueron suspendidos de sus tareas.
El fiscal Federico Grimberg, de la Unidad de Delitos Complejos, está al frente de la investigación. Créditos: Pablo Aguirre
Este jueves, Carnaghi y su esposa, María Belén Milessi (de 42 años, imputada como partícipe secundaria de las "estafas"), acudieron a los tribunales de la ciudad a una audiencia denominada multipropósito, presidida por el juez penal Nicolás Falkenberg. De mutuo acuerdo, la fiscalía, el querellante Esteban Campos y el defensor particular Néstor Oroño solicitaron al magistrado la imposición de las tres medidas cautelares no privativas de la libertad a las dos personas investigadas..
En esa línea, Grimberg informó que cuando imputó al matrimonio a mediados de abril, tanto Carnaghi como Milessi hicieron entrega de sus pasaportes. Habían regresado hacía poco al país, después de haber permanecido en el extranjero desde que la defraudación al Iturraspe salió a la luz a finales de 2023.
Fondo del 30%
Las estafas atribuidas a Carnaghi, quien se encargaba de la liquidación y el pago del Fondo del 30% en el Hospital Iturraspe, ocurrieron entre enero de 2020 y octubre del 2023. Su esposa, Milessi, también era empleada del efector de salud público.
El dinero del Fondo del 30% surge de la recaudación generada por los servicios que se brindan a usuarios de obras sociales, mutuales, prepagas, seguros de accidentes, medicina laboral y otras entidades similares, y según lo establecido por la normativa debe ser distribuido entre todas las personas que trabajan en el nosocomio.
De la investigación fiscal surgió que desde 2020 Carnaghi remitió al Consejo de Administración del hospital el detalle de las liquidaciones con información verídica acerca de cuánto dinero le correspondía a cada uno de los empleados y luego tergiversó las listas en el procedimiento administrativo mediante la cual se realizan los pagos.
El juez Nicolás Falkenberg impuso las medidas cautelares acordadas entre las partes del proceso. Créditos: Guillermo Di Salvatore
"El responsable de enviar el archivo al banco para materializar las transferencias alternaba datos tales como montos dinerarios, números de cuenta bancaria, números de DNI y nombres originariamente consignados", explicó el fiscal Grimberg oportunamente. Así se concretaron transferencias a personas que no debían recibirlas –entre ellas, Carnaghi y su esposa–, y por cantidades que no eran las informadas y aprobadas.
El matrimonio se benefició económicamente a partir de las maniobras ilegales, sostuvo el funcionario del MPA. Otras diez personas también fueron imputadas en el marco de la causa judicial, por haber obtenido ganancias a raíz de los ilícitos. Les atribuyeron la participación necesaria de "fraude en perjuicio de la administración pública".
Si bien las estafas fueron por un total de $ 38.337.865, éste monto actualizado por inflación asciende a más de 100 millones de pesos, según informó la fiscalía. "El número surgió del análisis de las sumas de dinero recibidas de manera ilegítima por las doce personas involucradas", resaltó Grimberg.
Juego clandestino
Además de las estafas, a Carnaghi le atribuyeron la coautoría de "organización y explotación de juegos de azar no autorizados con fines de lucro".
La atribución delictiva señala que sin la autorización correspondiente, tanto el imputado como otras personas cuya identidad se desconoce, "organizaron, administraron, explotaron y operaron actividades vinculadas a la captación de juegos de azar de manera clandestina".
Ésto, de forma habitual y continua, y dirigido a un público indefinido. Les ofrecieron crear usuarios para utilizar plataformas de casino online disponibles en alrededor de 20 páginas web, así como la venta y canje de créditos virtuales a cambio de dinero.
De la labor fiscal surgió que estos servicios ilegales fueron brindados por Carnaghi y sus cómplices desde diciembre de 2020 hasta octubre del 2023, obteniendo rédito económico por esto.