Martes 12.7.2022
/Última actualización 15:59
El escándalo, que sacude al ambiente policial de Rafaela y la región, se desató el pasado domingo por la difusión que tuvo en redes sociales imágenes que mostraban la celebración de un cumpleaños en un sector de la Alcaidía de la Unidad Regional 5, con uniformados y personas de civil consumiendo bebidas alcohólicas en medio de un ambiente celebrativo.
El hecho causó indignación porque desnuda el privilegio del que gozan algunos reclusos, más aún tratándose de un policía de alto rango que está encerrado por hechos reñidos con el uso del uniforme. En este caso se trata de Gastón Eletti, quien está acusado de numerosos delitos ocurridos meses atrás cuando se desempeñaba como jefe de Inspección en el Distrito 5 que abarca las localidades de Josefina y Frontera. Los delitos que se le endilgan son: privación ilegítimamente de su libertad a distintas personas; falsear y fraguar información en actas de procedimiento y solicitar y recibir dádivas, cuando desarrollaba sus labores en esta última ciudad.
Precisamente, Eletti se valió de sus “influencias” para organizar el cumpleaños de su pareja en un sector preparado para la ocasión y contiguo a la habitación especialmente preparada para que el ex policía transite su detención en las mejores condiciones, y aislado de los demás reos. A esta “anormalidad” se suma que el festejo y la concurrencia de personas se realizó en un día en el que no estaban las vistas a los presos.
Puesta en conocimiento de los vergonzosos sucesos, en la tarde noche del domingo, la fiscal en turno del Ministerio Público de la Acusación (MPA), Fabiana Bertero, ordenó allanar la sede del mando policial del Departamento Castellanos y también la Alcaidía, en busca de elementos que comprueban que la realización del festejo en el sector donde están alojados los encausados.
El procedimiento estuvo a cargo de investigadores de la Agencia de Control Policial (ACP) Delegación Centro Norte de la policía provincial y, si bien no se conocen los resultados, por las decisiones que se adoptaron en las últimas horas, la irregularidad, que tiene que haber contado, indefectiblemente, con la venia de las autoridades, debe estar lo suficientemente acreditada.
La intervención
Fue por ello, que en la misma mañana del lunes, el ministro de Seguridad de la provincia de Santa Fe, Jorge Lagna, decidió intervenir la UR V de Policía, y separar del cargo al jefe, director de policía Ricardo Marcos Arnodo Suárez, y a la segunda jefa, subdirectora de policía Marcela Genoveva Fernández, hasta que finalicen las actuaciones investigativas y se determinen las responsabilidades del caso.
Asimismo, Lagna adelantó que se abrieron dos investigaciones: una que apunta a la situacion penal, que se tramita en el MPA, por incumplimiento de los deberes de funcionarios públicos, y otra que corre por la vía administrativa interna de la fuerza la violación a los reglamentos de la institución policial.
El titular de la cartera de Seguridad, reveló también que se secuestraron libros de guardia y cámaras, debido a que los hechos se registraron en momentos en que las visitas no estaban habilitadas.
Finalmente, el Ministro puntualizó que los jefes salientes fueron destinados al Departamento 1, a los fines de un nuevo destino, siempre y cuando así lo permitan las investigaciones iniciadas.
Por la tarde, se conoció que Jorgelina Aguirre ya estaba al comando de la UR V, como Interventora y puesta en funciones por la Jefa de Policía de la Provincia, Emilce Chimenti, quien la acompañará el tiempo que sea necesario para la reorganización policial que se impone.
Hasta su llegada a Rafaela, la Interventora revistaba como Jefa del Departamento División Judiciales (D5) de la Policía provincial e integraba la Plana Mayor de la Fuerza