Los jueces federales de Rosario, Ricardo Moisés Vázquez, Eugenio Martínez Ferrero y Osvaldo Facciano, deberán resolver la semana próxima si dan curso o no a la recusación del Tribunal Oral Federal de Santa Fe, en lo que será el juicio oral y público de la denominada Causa Bolsafe, que tiene al contador Mario Rossini como principal imputado de una millonaria estafa con más de 400 víctimas presentadas.
La recusación, que apunta a los jueces locales, José María Escobar Cello, María Ivón Vella y Luciano Homero Lauría, fue presentada días pasados por los defensores públicos oficiales, Mariana Rivero y Hornos y Mariano Rosatti, quienes representan a siete de los nueve implicados.
Fuentes tribunalicias confirmaron la recusación, aunque aclararon que ésta “no fue aceptada por el tribunal”, motivo por el cual “se sortearon tres jueces -de Rosario- que van a resolver sobre la recusación” y deberán hacerlo durante el transcurso de la próxima semana, atento que el tribunal había fijado fecha de debate para el jueves 17 de octubre.
Asimismo, fuentes consultadas aclararon que ya existía “un pedido de suspensión” del juicio, pero no por haber sido recusados los jueces, sino por la negativa a conceder el beneficio de suspensión de juicio a prueba -probation- para una de las imputadas, la cual fue recurrida y no se encuentra firme.
En definitiva, todo hace creer que hasta que no se resuelvan estas dos cuestiones, la fecha de inicio del debate es incierta.
El debate oral que se avecina refiere solamente al primero de tres tramos de la causa penal, en la que se investiga una estafa estimada en 2016 en 256 millones de pesos en perjuicio de 408 ahorristas víctimas. El principal imputado es el contador Mario José Enrique Rossini quien será juzgado en su carácter de presunto autor de los delitos de “defraudación por administración fraudulenta” en concurso ideal con “captación de ahorro público e intermediación no autorizada en el mercado de valores”; figura legal que comparte en coautoría con la contadora María Mercedes Leiva; en tanto su hermano, el abogado Omar Santos Rossini, lo está como coautor de la administración fraudulenta.
Las seis restantes (Daniela Reatti, Carolina Fany Pavarín, María Lorena Molinas, Patricia Lorena Berrino, Marisa Laura Valdéz y Miriam Analía Sabella), son ex empleadas de las firmas Bolsafe Valores SA y BV Emprendimientos SA, y están procesadas como partícipes principales de la maniobra fraudulenta.
La causa Bolsafe se inició en diciembre de 2012 ante la Justicia provincial, luego pasó a la órbita de la Justicia Federal, que finalmente la elevó a juicio a fines de 2017. En este caso fue el juez Federal Nº 2, Francisco Miño, a instancias del fiscal federal Nº 2 Walter Rodríguez, que cerró la primera de tres etapas de una compleja trama en la que se investigan delitos que afectaron tanto a particulares como al orden económico-financiero.