Juan Manuel Peratitis
La maniobra se perpetró en una estación de servicio de Clason. El delincuente fue atrapado en Chaco.
Juan Manuel Peratitis
Un audaz estafador manipuló el equipo de posnet de Mercado Pago de una estación de servicio para que todas las transferencias de los clientes vayan a parar a una cuenta suya. Así, recibió casi tres millones de pesos en su CBU antes de ser descubierto. La maniobra fue perpetrada en la localidad de Clason y el delincuente fue atrapado en la provincia de Chaco, de donde es oriundo.
El caso está en manos del fiscal del departamento San Jerónimo, Marcelo Nessier, quien había dispuesto que las actuaciones sean llevadas a cabo por personal de la Agencia de Investigación Criminal de Coronda.
Todo comenzó unos cinco meses atrás, en una estación de servicio de Clason, localidad del departamento santafesino de Iriondo, a la vera de la Ruta Nacional 34.
Hasta allí llegó un hombre para cargar combustible. En el momento de pagar, este sujeto aprovechó un descuido del playero para manipular el aparato. A partir de allí, todos los pagos que realizaban los clientes por ese medio iban a parar a la cuenta del malviviente: "El chipá chaqueño" según figuraba en la entidad bancaria. Tenía domicilios en Mar del Plata y también en Resistencia, pero eran apócrifos.
Los responsables del negocio estafado recién se percataron de la maniobra días más tarde, cuando habían perdido casi tres millones de pesos.
Tras una extensa investigación, los detectives siguieron el rastro del dinero y llegaron hasta el culpable, en la provincia de Chaco. El estafador fue apresado –con la colaboración de la policía local- y luego extraditado a Santa Fe.
En audiencia, el fiscal Nessier lo imputó por estafa, pero acordó que permanezca en libertad mientras sigue el proceso. No obstante, en los próximos meses deberá devolver el monto total de la suma robada. Como garantía, fue secuestrada una camioneta Ford Ranger. Luego, se firmaría un juicio de procedimiento abreviado.
Ante este tipo de delitos, la policía advierte a los comerciantes que estén alertas, que no permitan la manipulación de posnets ni cambios en los códigos QR.