La tranquilidad en el histórico barrio Roma de Santa Fe parece haber quedado atrás. En las noches, el temor se instala entre los vecinos que denuncian reiterados hechos de inseguridad: desconocidos patean portones, violentan puertas y trepan a los techos de las viviendas.
El último incidente ocurrió en la madrugada del sábado, cuando varios ladrones ingresaron a una casa en calle Lamadrid al 2500. Aprovechando la ausencia del propietario, un hombre mayor internado en un asilo, los delincuentes saquearon el lugar. Revolvieron cada rincón, causando destrozos, y se llevaron todos los objetos de valor que pudieron cargar.
El estado en que quedó la vivienda de calle Lamadrid 2500, tras el paso de los delincuentes.
Pero no se trata de un hecho aislado. En el barrio, los vecinos aseguran que tampoco es seguro caminar por las calles. Los arrebatos y asaltos son frecuentes, perpetrados por delincuentes a pie o en moto, e incluso los usuarios del transporte público se ven atacados mientras esperan el colectivo.
Ante este panorama, los habitantes de Barrio Roma exigen con urgencia una mayor presencia policial. Piden más patrullajes y vehículos que recorran las calles, con la esperanza de recuperar la seguridad que se ha ido desdibujando en sus vidas cotidianas.
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