La saga de violencia y muerte sigue teniendo a la ciudad de Rosario y a todo el departamento, ubicado en el sur santafesino, en el centro de la escena. El tercer mes del año finalizó con 22 homicidios, dos en Pérez, tres en Villa Gobernador Gálvez y 16 en Rosario. En los primeros 90 días del año se cometieron 80 crímenes, 15 más que a la misma altura de 2022.
Las cifras van en claro aumento, demostrando que los tiratiros (que muchas veces mal llamamos sicarios, al compararlos con pseudo profesionales del delito que viven en otros sitios del mundo) siguen sembrando el temor a fuerza de balas.
En forma periódica se van conociendo hechos de intimidación pública contra personas e instituciones, traducidas en balaceras y amenazas que parecen provenir desde las cárceles, demostrando que quienes están tras las rejas siguen teniendo un inexplicable y peligroso poder. También se siguen registrando crímenes, muchos de ellos de características sicarias y violentas, dejando a gran parte de la sociedad librada a su suerte.
El hecho que más conmocionó a la ciudad fue el asesinato de Máximo Jeréz, un niño de 11 años.
Los homicidios ocurren a cualquier hora del día, en cualquier lugar. A veces no importa si hay testigos, los tiratiros van con una misión que intentan cumplir a rajatabla, quizás para demostrar que "nada los detiene", quizás para mostrar "alto poder de fuego" y/o porque "quieren ganarse un lugar" ante quienes encargan esos ataques o muertes.
Ejecución
En el atardecer del miércoles 1º de marzo, Victorio Benjamín Echevarría fue asesinado a tiros en una esquina del barrio Triángulo, en la zona oeste de Rosario, iniciando un mes que terminó con 22 homicidios.
Mientras algunos vecinos estaban en la calle intentando mitigar el calor y la humedad, apareció un auto con varias personas en su interior. Del rodado bajaron a una persona y luego le efectuaron varios disparos de arma de fuego desde muy corta distancia. Mientras las personas se escondían en sus casas ante el temor de ser alcanzados por las balas, los atacantes se dieron a la fuga.
Instantes después, varias personas se acercaron hasta el cuerpo que quedó tendido en medio de la calle, mientras en el 911 comenzaban a recibirse llamados denunciando el ataque.
Poco después llegaron al lugar varios patrulleros y también personal médico, que constató el fallecimiento de la víctima, que fue identificada casi 24 horas después.
El hecho de que la víctima haya sido bajada de un auto y asesinada tiene mucha semejanza al de Lorenzo Altamirano, más conocido como Jimi, quien en la noche del miércoles 1° de febrero (exactamente cuatro semanas antes), fue bajado de un auto frente a una de las puertas de ingreso al estadio de Newell's Old Boys, donde fue atacado a tiros. Recibió al menos dos impactos, uno de ellos en el cráneo y falleció en horas de la madrugada.
El mediático ataque contra un súper
No habían pasado 12 horas del primer crimen que la ciudad de Rosario se vio convulsionada por un nuevo ataque contra las puertas de un supermercado, balacera que tuvo trascendencia mundial porque los dueños eran familiares de Antonela Rocuzzo y porque, además de la docena de impactos, dejaron un mensaje intimidante dirigido ni más ni menos que para Lionel Messi.
El ataque a tiros se registró a las 3.20 AM del 2 de marzo frente al súper de la cadena Único, ubicado sobre calle Lavalle al 2500, entre Ocampo y bulevar 27 de Febrero, a menos de 300 metros hacia el oeste del Mercado de Productores y a casi 500 metros de barrio Villa Banana, un sector que cuenta con un gran asentamiento irregular de viviendas, que está siendo intervenido desde hace más de una década.
El supermercado que los suegros de Lionel Messi tienen en Rosario fue baleado en marzo.
Los autores del hecho fueron dos personas que llegaron en una moto y pararon frente al local, que cuenta con persianas (que estaban bajas). Tras esto, uno de ellos se bajó y efectuó múltiples disparos hacia el frente del lugar, y luego ambos se dieron a la fuga.
A esa hora, personal del Comando Radioeléctrico acudió hasta Lavalle 2546 por detonaciones de arma de fuego. Cuando llegaron, observaron 12 vainas servidas, y en las persianas de metal de un comercio, 14 impactos. Instantes después, un vecino relató que estaba sentado en la vereda y que vio a dos personas en una moto tipo Titán que detienen su marcha frente al supermercado, uno de ellos desciende y arroja lo que podría ser un papel y luego comienza a efectuar detonaciones, para luego volver a subirse a la motocicleta y retirarse por calle Lavalle hacia el sur (en contramano).
La Agencia de Investigación Criminal llegó cerca de las 8 AM, varias horas después del violento episodio. Recogieron las vainas, hicieron los peritajes y sacaron fotos a la calle, las persianas, el interior del local y al trozo de papel (parte del interior de una bolsa de carbón) que tenía un mensaje bien redactado, en letra de imprenta, la mayoría de las palabras en mayúsculas y sin errores, que a esa altura ya había sido manipulado por varias personas.
El papel encontrado en cercanías al supermercado.
"MESSI TE ESTAMOS ESTAMOS ESPERANDO JAVKIN ES NARCO NO TE VA A CUIDAR…" decía el texto que recorrió el mundo entero.
Homicidio y pueblada en Empalme Graneros
Alrededor de las 2 AM del domingo 5 de marzo, un demencial ataque a tiros en calle Cabal al 1300, del asentamiento Los Pumitas que forma parte del barrio Empalme Graneros, terminó con un niño de 11 años asesinado y otros 3 menores heridos de bala, internados en el hospital de niños Zona Norte.
A esa hora, varias personas pasaron en un auto, con el propósito de atentar contra una vivienda señalada como punto de venta de drogas de una banda rival, pero sin tener en cuenta que en el medio había un grupo de personas, entre ellos varios niños, que estaban en la calle.
Cuatro niños de entre 2 y 13 años resultaron heridos. Uno de ellos, Máximo Geres, de 11 años, llegó sin signos vitales al hospital de Niños y falleció a los pocos minutos, como consecuencia de un disparo en el pecho.
Pasado el mediodía del lunes 6, luego del velatorio y entierro de Máximo, casi un centenar de personas incendió una moto y derribó al menos tres viviendas que fueron apuntadas como lugares de venta de droga (búnker).
Lo que terminó siendo una especie de pueblada se fue gestando a medida que pasaban las horas y los residentes del barrio iban a darle el último adiós a Máximo en el club Los Pumas. Cuando salían, caminaban hacia la zona de Cabal al 1300 bis. Si bien en el lugar hubo durante el velatorio varios patrulleros, cuando el cortejo se fue, también lo hicieron los coches policiales.
En pocos segundos, los vecinos protagonizaron una pueblada: intentando hacer justicia por mano propia, lanzaron ladrillos y botellas contra una vivienda para intentar sacar del lugar a un vecino, ante las cámaras de televisión de varios canales que estaban en la zona.
En un momento se escucharon varios disparos y luego apareció personal policial, que lanzó gases lacrimógenos y balas de goma contra la gente que intentaba llegar hasta al menos una vivienda.
En un momento, varios manifestantes tomaron mazas y distintos objetos contundentes, entre ellos un hierro que supo ser el sostén de un canasto para depositar basura y derribaron la pared de ingreso a la vivienda del presunto vendedor de drogas, aprovechando que había un agujero tapado con ladrillos cerámicos sin revocar.
Luego de varios minutos volvieron al lugar patrulleros de la policía provincial y también del grupo Giri (Grupo de Infantería de Respuesta Inmediata), para intentar calmar a quienes estaban protestando en plena calle e intentando derribar la vivienda.
Algunos uniformados lograron sacar al hombre apuntado como narco, en medio de puteadas, y luego, muchos de los presentes derribaron tres viviendas ubicadas a pocos metros una de otra, señaladas como punto de venta de drogas. También se llevaron todo lo que había en su interior, incluidos varios electrodomésticos, muebles y ropa.
La policía halló en las viviendas que fueron derribadas por los vecinos varias armas de fuego, entre ellas una pistola ametralladora. Además, detuvo en forma preventiva a tres personas.
Doble crimen en Villa Gobernador Gálvez
En la tarde del sábado 11 de marzo, una seguidilla de disparos estremeció a los vecinos de la zona de Capuchinos al 1700, al oeste de Villa Gobernador Gálvez. En base a distintos testimonios, hasta ese lugar llegó un auto con varias personas en su interior, al parecer con intenciones de balear una vivienda que se presume era usada como lugar de venta de estupefacientes.
Al parecer, cuando llegaron se produjo un intercambio de disparos, ya que desde el interior de la casa también dispararon y poco después, el auto en el que se desplazaban los tiratiros, un Renault de color blanco, se dio a la fuga.
Un rato más tarde, llamados al 911 denunciaron que en inmediaciones de Balcarce y Avellaneda, al este de Villa Gobernador Gálvez (a unas 15 cuadras del lugar del ataque) había un auto con una persona sin vida en su interior. Cuando llegó personal policial y médico, constató que en el interior del rodado estaba el cuerpo sin vida de Cristian Damián Luque, de 30 años, con múltiples disparos de arma de fuego. Bajo uno de los asientos del auto, los investigadores hallaron una pistola calibre 9 milímetros.
Casi al mismo tiempo ingresó en el hospital Gamen, un hombre de 30 años, identificado como Severo Ignacio Saucedo, con una herida de arma de fuego en la zona de tórax. Debido a la gravedad de su estado clínico, fue trasladado al hospital de emergencias de Rosario, donde falleció.
Según fuentes de la investigación, ambas personas fallecidas formaron parte del grupo que fue hasta la vivienda en Capuchinos al 1700. Por este hecho, la policía detuvo a un joven de 18 años, que quedó detenido y a disposición de la Justicia.
Muerte en barrio Ludueña
El crimen con el cual se cerraron las estadísticas de marco ocurrió en la noche del viernes 31, en una casa ubicada sobre pasaje Campichuelo al 3000, a pocos metros de la plaza Pocho Lepratti, ubicada en barrio Ludueña, al noroeste de Rosario.
Dos personas en moto llegaron hasta esa calle, ubicada entre Camilo Aldao y Larrea y asesinaron a Juana Vega, de 69 años. Sobre el hecho hay varias versiones. Una de ellas indica que los tiratiros pasaron en moto y atacaron a tiros a Juana, que estaba en la puerta de su vivienda. Otra indica que el ataque se produjo cuando la víctima salía de su casa. Mientras que una tercera indica que los atacantes fueron hasta la vivienda de Juana, tocaron a la puerta y cuando ella salió a atender, la asesinaron.
A la hora del ataque, personal de la Policía Federal se encontraba en la esquina de French y Solís, a solamente 10 cuadras, realizando un operativo de control vehicular. Un vecino de la zona les contó que se habían escuchado detonaciones de arma de fuego en la zona de Larrea y Campichuelo, por lo que varios uniformados fueron hasta el lugar y encontraron a la víctima tendida en el ingreso a una vivienda, con una herida de arma de fuego en el cráneo.
Un rato más tarde llegó personal de la policía santafesina y una ambulancia del Sies, que constató el fallecimiento de la mujer.
Registros
Marzo cerró con 22 en el departamento Rosario. En base a datos propios y al informe del Observatorio de Seguridad Pública del Ministerio de Seguridad santafesino, en los primeros 90 días del año fueron 80 los homicidios cometidos en el departamento Rosario (26 en enero, 32 en febrero y 22 en marzo).