Carlos Retamal
La víctima tenía 45 años. Fue encontrada en la parte posterior de su local. No había desorden, así que descartaron la hipótesis de robo. Entre sus dedos había mechones de cabello. La mayor parte de las heridas fueron en el cráneo y el cuello.
Carlos Retamal
La saga interminable de violencia parece no tener fin. En los primeros minutos de la noche de este jueves 14 de abril se conoció el deceso de una mujer de 45 años en el hospital de emergencias, al cual había llegado unos minutos antes desde la zona oeste. Si bien en un momento se especuló con que la víctima se había caído, la autopsia develó que tenía múltiples heridas de arma blanca y varios mechones de cabellos entre sus dedos.
El hecho comenzó a conocerse pasadas las 18:30 del jueves 14 de abril, cuando personal policial del destacamento ubicado en el hospital de emergencias Clemente Álvarez se comunicó con el fiscal en turno de la Unidad de Homicidios Dolosos, Adrián Spelta, para informarle que había ingresado un auto hasta la rampa de ambulancias que desemboca en el área de guardia. En el vehículo iban tres personas, una de ellas era un hombre de 52 años, que traía a su esposa, de 45, que estaba cubierta de sangre.
Mientras la señora era ingresada a una sala, su marido dijo que la había encontrado tirada en la parte posterior de su negocio, denominada ‘El Cotillón’, ubicado en avenida Rivarola al 6800, zona oeste de Rosario.
La mujer, identificada como Sandra Verónica López, de 45 años, ingresó sin signos vitales y pese a las tareas de resucitación cardio pulmonar, falleció.
Su marido dijo que no sabía lo que había ocurrido, repitió que la había encontrado tirada en la parte posterior del comercio y que creía que fue un accidente.
Sin embargo, un primer examen forense determinó que el cuerpo tenía múltiples heridas de arma blanca en la cara, el cuello y los hombros, por lo que la idea sembrada del supuesto accidente fue descartada. Ante esto, se inició el protocolo de revisión del cuerpo por violencia de género. Al revisar sus manos, se encontraron mechones de cabellos entre sus dedos.
Por orden del fiscal Spelta, personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) fue hasta el local, que estaba cerrado, con las persianas bajas y un candado en la puerta. Pasadas las 20, agentes del gabinete criminalístico lograron ingresar al local y comprobaron que no había desorden. Revisaron en forma pormenorizada el lugar y hallaron mechones de cabellos en el piso (similares a los encontrados entre los dedos de la víctima).
Fuentes de la investigación indicaron que se le realizó un examen médico al esposo de la víctima, identificado como José Luis G., de 52 años y se secuestraron las prendas de vestir que llevaba al momento de ingresar al hospital de emergencias. También se requisó el auto en el que habían llegado.
En base a las primeras pericias e inspecciones en el lugar, se descartó el móvil del robo, ya que todo en el interior del local estaba en su lugar. Además, el resultado de la autopsia realizada en la mañana del viernes arrojó que la víctima tenía 14 cortes de diversas magnitudes producidos por arma blanca en la zona del cuello y el cráneo. Y también que tenía restos de material genético en sus manos, que serán sometidos a pericias de ADN.
Por orden del fiscal Spelta, se realizó un relevamiento de la zona en busca de cámaras de seguridad, cuyas imágenes fueron pedidas y están siendo analizadas por la división homicidios de la AIC. Al parecer, hay al menos una silueta de porte femenino que sale del local alrededor de las 18:30, por lo que se están buscando otras cámaras en la zona para ver si hay forma de seguir el rastro de esta persona.
Ya son 12 los asesinatos registrados en 14 días del mes de abril, lo que equivale a uno cada 28 horas en el departamento Rosario.