Por Carlos Retamal
Al menos dos personas sorprendieron a una empleada que trasladaba una saca con dinero de un sector al otro de la planta ubicada en la zona noroeste. Huyeron en un auto que los esperaba en la puerta, que luego abandonaron a unas 15 cuadras.
Por Carlos Retamal
Con marcada precisión y un aceitado y hasta el momento minucioso trabajo de investigación previo, un grupo conformado por al menos 3 personas sorprendió en la mañana de ayer a una empleada de la empresa La Virginia y bajo amenazas, le llevaron una bolsa que contenía más de 2 millones de pesos y se dieron a la fuga.
El robo tuvo lugar entre las 9 y las 9:30 de este lunes 1 de marzo, cuando al menos dos personas cortaron al menos dos tornillos del tejido perimetral que separa la planta de la colectora Juan Pablo II (calle paralela a avenida Circunvalación) justo al costado de una casilla en la que funciona una subestación transformadora de energía.
Voceros judiciales indicaron a Mirador Provincial que en principio dos personas armadas ingresaron por ese lugar e interceptaron a una empleada de la empresa cuando llevaba en un carrito similar a los que se usan en los supermercados una saca que contenía una suma superior a los 2,5 millones de pesos.
En principio se presume que al menos uno de los ladrones estaba armado, aunque la empleada no pudo confirmarlo ya que -presa de un ataque de nervios- no pudo ratificar sus dichos y posiblemente un chaleco antibalas.
La secuencia dentro de la planta no duró más de 5 minutos. Luego de agarrar la saca y tras amenazar de muerte a la empleada, los dos hombres salieron por el mismo agujero que habían hecho en el cerco, se subieron a un utilitario Peugeot de color verde donde los esperaba al menos una persona al volante y se dieron a la fuga por Juan Pablo II hacia el norte. Luego tomaron por avenida Sorrento hacia el este y dejaron abandonado el auto al costado del camino, a la altura de calle Barra.
Los investigadores presumen que en ese lugar cambiaron de auto y se marcharon con rumbo desconocido. La zona donde quedó el utilitario no tiene cámaras de seguridad, aunque hay algunas en las inmediaciones, que serán revisadas por personal policial.
Voceros del caso señalaron que el dinero era trasladado a una zona de la planta en la cual hay tres cajeros y que esa maniobra no se realiza todos los días, luego de un horario determinado, por lo que se presume que los autores del atraco contaban con información precisa de los movimientos de dinero dentro de la empresa.
Algunos camioneros que trabajaron tiempo atrás con la empresa La Virginia indicaron a Mirador Provincial que la empresa tiene muchas medidas de seguridad, no solamente por el Covid sino por el manejo de dinero, y que cuando ingresaban con sus rodados de gran porte dentro del extenso predio, iban hasta la zona donde hay 3 cajeros y depositaban el dinero. “Ese lugar cuenta con cámaras de seguridad y para llegar ahí pasás varios controles”, sostuvo un chofer.
“Pero a una hora ya no se puede depositar más, entonces se va a otra zona de la planta, se hace una planilla, se firma y se entrega la plata, y luego es personal de la empresa la encargada de guardarla en los cajeros, la deben haber sorprendido hoy, con plata del viernes a la tarde y a lo mejor del sábado”, especuló otro conductor.
Cabe remarcar que el lugar por donde ingresaron los ladrones está ubicado unos 300 metros al norte del ingreso principal y si bien hay cámaras de seguridad en el interior, ninguna apunta a ese sector de la reja (junto a la subestación transformadora de energía). Además, las fuentes señalaron que la firma La Virginia cuenta con custodia a cargo de personal de Gendarmería, que está en los ingresos a la planta, no como rondines en todo el perímetro.