Se sacó fotos desnuda bajo amenazas, le contó al marido y la echó de la casa
La denuncia fue radicada hace dos semanas en la ciudad de Florencia, donde el viernes pasado la Justicia allanó una vivienda donde secuestró teléfonos cuyo contenido se mandó a peritar.
Se sacó fotos desnuda bajo amenazas, le contó al marido y la echó de la casa
Martes 30.3.2021
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Última actualización 0:13
Una mujer de 25 años de la ciudad de Florencia, en el extremo norte provincial, denunció hace dos semanas un caso de ciberacoso que luego se convirtió en una extorsión lisa y llana, cuando un joven de su misma edad pretendió mantener relaciones sexuales a cambio de no revelar imágenes eróticas que consiguió presuntamente bajo amenazas.
Como resultado de la investigación, el viernes pasado la Justicia allanó una vivienda de la misma ciudad, donde vive el acusado junto a una mujer de 72 años, y cuyo resultado fue "positivo" en cuanto al hallazgo de tres teléfonos celulares que quedaron secuestrados, a la espera de los peritajes.
El allanamiento fue solicitado por el fiscal de Las Toscas, Juan Carlos Koguc y ordenado por el juez de Reconquista, Santiago Banegas. En tanto, otras medidas probatorias se encuentran en trámite, a los fines de acreditar si se trató de un único hombre o participaron más individuos, como dice la denuncia.
Si bien no hay detenidos y hasta el momento no se celebró audiencia imputativa, desde la fiscalía de Koguc pretenden profundizar la investigación para descartar otras hipótesis, como un posible caso de sexting que derivó en una maniobra extorsiva, entre otras.
Por Facebook
La denuncia policial radicada en la Comisaría 9na. de Florencia data de la tarde del jueves 18 de marzo, cuando se presentó una mujer que narró un presunto caso de chantaje a través de la red social Facebook, del cual estaba siendo víctima hacía algunos días.
Dijo que un hombre se contactó con ella por esa vía, y sin preámbulos "le solicitó que le mandara fotos desnuda", porque de lo contrario "le haría algo a su hijo y a ella", según informó la oficina de Relaciones Policiales de la Unidad Regional IX.
El anónimo le habría dicho que "sabía que estaban solos", puesto que su marido trabaja como camionero y se encontraba fuera de la ciudad por esos días; y en su afán de proteger a su pequeño se convenció que lo mejor en ese momento era cumplir con el deshonesto pedido y le envió fotos en ropa interior.
Fotos robadas
Pero el lascivo interlocutor no se detuvo y acto seguido le pidió más fotos, ahora ya sin ropa. Como la primera vez, el ciberacoso incluyó la mención de que si no lo hacía, difundiría las primeras fotos y la etiquetaría, para avergonzarla ante sus allegados. Una vez más la mujer creyó que lo mejor era saciar los bajos instintos del desconocido y le envió las fotos pretendidas.
Cuando le reclamó que dejara de molestarlos a ella y su hijo, el hombre puso como excusa que otro sujeto le había robado las fotos. Entonces optó por bloquear el contacto y dar por terminado el asunto y decide borrar los chats con las presuntas amenazas.
Por Whatsapp
Sin embargo, como una historia de nunca acabar, unos días más tarde un joven "le comenzó a escribir por Whatsapp y a llamarla diciéndole que tenía sus fotos". Aquí la extorsión vulneró la barrara de lo virtual, porque el supuesto ofensor sexual pretendía tener relaciones sexuales con la joven madre a cambio de no difamarla en las redes sociales.
Desconfiando de la palabra del desconocido, la mujer optó por bloquear el contacto y no atender las llamadas, pero al día siguiente el sujeto llegó hasta su puerta, alrededor de las once de la noche y la amenazó con mandarle las fotos al marido, que estaba e viaje en Mar del Plata.
Aunque lo rechazó, tanta fue la insistencia del hombre que la mujer accedió a "sacarse una foto desnudos los dos", al solo efecto que "la dejara de molestar y se retirara del domicilio", según consta en el acta policial.
Con lo puesto
Tal vez por inverosímil, cuando llegó su marido de viaje y la joven le contó las peripecias por las que había pasado en su ausencia, éste optó por descreer de la versión y la echó de la casa con lo puesto.
La mujer hizo la denuncia policial y se notificó al fiscal de Las Toscas, que la semana pasada solicitó un allanamientos en una vivienda de la calle Juan XXIII, donde supuestamente vive el presunto acosador.
El procedimiento, llevado a cabo por efectivos de la comisaría local, derivó en el secuestro de tres celulares de las marcas Blue, Lenovo y Nokia, los cuales fueron enviados a peritar y cuyo contenido es hasta ahora un verdadero misterio.