De la Redacción de El Litoral
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Dos graves incidentes que se presentan como casos de violencia de género ocurrieron durante las últimas horas en distintos puntos de la provincia.
En nuestra ciudad, una casa de calle Los Pinos al 2700 fue escenario esta madrugada de un episodio de violencia extrema que derivó en la internación urgente de una joven mujer que habría sido atacada por su pareja.
Los primeros rastros relevados en la escena indican que fue atacada con una maza mientras dormía. Los pesquisas hallaron la herramienta cerca suyo, con rastros de sangre.
La mujer, de 27 años, se llama Griselda Maras y vive en esa casa, con su pareja de 30 y el hijo de ambos, un pequeño de 8.
La víctima fue auxiliada en un primer momento por su propia madre, a quien alcanzó a decir que su marido había sido el autor de la salvaje agresión.
Del paradero del hombre no se sabe nada hasta el momento, ya que tras los hechos desapareció de todos los lugares que frecuentaba.
Cerca de las 5 de hoy, la mujer malherida ingresó al Hospital José María Cullen, donde fue recibida en el shockroom. Minutos después, los médicos informaron a la familia que presentaba un cuadro de hundimiento de cráneo y que su estado era delicado.
Tragedia
El otro dramático suceso se generó dentro de una vivienda de Elortondo, localidad del departamento General López, más precisamente en cercanías de la esquina que forman las calles Austria y Mitre.
El pasado martes, un hombre y una mujer perdieron la vida allí de manera violenta, en circunstancias que están siendo investigadas.
Las víctimas fueron identificadas por la policía como Zully Alamanni y Eduardo Guevara, ambos de 58 años. Ella era la dueña de casa, él su ex marido.
Según pudo reconstruirse, el hombre llegó al lugar en su auto y se reunió con su ex mujer. Como algunas otras veces, los gritos siguieron a las palabras y finalmente se escucharon dos disparos de un arma de fuego.
Fueron vecinos quienes lograron entrar por una ventana y encontraron los cadáveres tendidos en el suelo.
Alamanni había sido ejecutada de un balazo en la parte superior del cráneo. Guevara falleció por un tiro a la altura de la sien.
Un médico policial se hizo presente, certificó el deceso y aconsejó que se practiquen las autopsias de rigor, por lo que los cuerpos fueron trasladados a la morgue de la ciudad de Venado Tuerto.
Cabe mencionar que en el lugar del hecho, investigaciones procedieron al secuestro del arma utilizada y demás elementos de interés para la causa.