San Juan: declaró uno de los cómplices de Irma Rosario Calivar por el crimen del jubilado
Los tres sospechosos señalados por la Justicia fueron citados a declarar este miércoles, pero solo uno de ellos dio su testimonio sobre el caso de Luis Arena, el jubilado encontrado muerto en Chimbas.
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Este miércoles se presentaron a declarar los tres imputados por el caso de Luis Arena, el jubilado que fue a retirar sus haberes el pasado 16 de septiembre y fue encontrado sin vida en un baldío de Chimbas varios días después. Se trata de Irma Rosario Calivar, conocida como la “viuda negra”, Marcos Francisco Bustos (marido de Calivar) y Roberto Álvarez, que fueron citados por la jueza María Gema Guerrero, quien en este momento es la jueza subrogando del 2do Juzgado de Instrucción que lleva la causa.
De los tres sospechosos, solo Bustos brindo declaraciones a la Justicia y el resto se abstuvo a declarar. Fue el abogado defensor este último, el letrado Claudio Vera, quien dio detalles de la testimonial de su cliente. "Bustos dijo que no conocía al señor Arena y negó todo tipo de participación en la muerte del jubilado". Y agregó que "de igual manera no les han dado la excarcelación a ninguno de los tres y van a continuar detenidos en la Central de Policía hasta que se sigan tomando testimonios y cotejando las pruebas que van recabando", sostuvo el abogado.
La más complicada de los imputados es la llamada “Viuda negra” en el presunto asesinato del jubilado Carlos Luis Arena. Ya que una cámara de seguridad de un negocio del centro sanjuanino captó a Calivar junto al anciano caminando por el centro. De igual manera aparece el testimonio de un vecino del barrio San Francisco 2 de Chimbas, que afirmó haber visto al anciano en la casa donde estaban estas tres personas. Y de momento la tercera prueba que también complica a los sospechosos es una tarjeta SUBE que habría sido usada por la mujer para trasladar al anciano.
"Los acusan de haber llevado al jubilado a la casa de Calivar, pero no hay pruebas fehacientes, solo un testigo que dijo haber visto al jubilado, pero que no tiene sustento", dijo el abogado de Bustos. Y agregó que "mi cliente está deprimido por la detención porque sostiene que no tuvo nada que ver".
El caso
El cuerpo de Luis Arena (75) apareció en un terreno baldío cercano al cruce de Santa Cruz y Maradona, detrás del Barrio Los Tamarindos. Fue una vecina que paseaba a su mascota quien encontró el cuerpo cerca de las 9.30 de aquel domingo. La misma relató que el cadáver estaba boca abajo y que a simple vista presentaba signos de violencia: le faltaba parte de una mano, de una oreja y tenía marcas de golpes en la cabeza. Además, estaba en avanzado estado de descomposición. Los investigadores presumen que el cadáver fue plantado en ese lugar, es decir, que a Arena lo mataron en otro lado y que lo llevaron a ese lugar en horas de la madrugada.
La presunción es que la mujer lo invitó a su casa en Chimbas y caminaron por Libertador para tomar un colectivo. La cámara de seguridad de un comercio captó a la mujer y al jubilado en esos instantes, antes que abordaran el micro que los trasladó al barrio Los Tamarindos o sus alrededores, en Chimbas. Para entonces, creen, el anciano estaba dopado y fue ahí que le quitaron el dinero. La hipótesis es que Arena se les murió producto de la droga que le dieron y que después arrojaron su cadáver en ese predio detrás del barrio Los Tamarindos. O que lo dejaron semi inconsciente y que el anciano caminó hasta que se desplomó y murió en ese descampado.