Un hombre de 35 años fue condenado por distintos hechos de amenazas a mano armada ocurridos en diciembre de 2022 y enero de 2023. Debido a que se encontraba preso desde hacía meses, obtuvo la libertad asistida.
Una kiosquera, una joven y su madre fueron víctimas del hombre de 35 años, que aceptó su culpa en los hechos y recuperó la libertad.
Un hombre de 35 años fue condenado por distintos hechos de amenazas a mano armada ocurridos en diciembre de 2022 y enero de 2023. Debido a que se encontraba preso desde hacía meses, obtuvo la libertad asistida.
Así lo resolvió el juez Sebastián Szeifert, luego de que la fiscal Rosana Peresín y el defensor particular Patricio Jullier le presentaron un acuerdo de juicio abreviado. En el mismo, Ignacio David Román reconoció su responsabilidad por los delitos que le fueran atribuidos.
Previo a la condena y la imposición de la pena convenida (1 año y 1 mes de prisión efectiva), la defensa solicitó que Román ingrese al régimen de libertad asistida, por lo que en su sentencia el magistrado dispuso el cese de prisión.
Román fue condenado como autor de "amenazas calificadas por el uso de arma de fuego", reiteradas en tres oportunidades.
La noche del 1 de diciembre de 2022, alrededor de las 21, el hoy condenado se acercó a un kiosco ubicado en Bernard al 9500, a donde asistió acompañado por un hombre que no pudo ser identificado. Una vez allí, amenazó a la mujer que estaba atendiendo el comercio, manifestándole que la iba a "cagar a tiros" y que se iba a "comer una bala".
Minutos más tarde, regresó al kiosco y, sin mediar palabra, se levantó la remera, exhibiendo el arma de fuego que llevaba en la cintura, para luego retirarse.
El 17 de enero de 2023, a las 18, Román se presentó en una vivienda de calle Chubut al 6200 y, utilizado una pistola, le pegó un culatazo en la cabeza a la mujer que residía allí. Tras agredirla, la insultó y amenazó: "Vos, putera de mierda, te voy a matar cuando sigas haciendo puterío, ya te voy a enganchar en la calle".
Luego, se dirigió a la madre de la joven, a quien le gritó "a usted también la voy a matar", antes de irse del domicilio.
Una semana más tarde, la mañana del 26 de enero, en inmediaciones de calle Beck Bernard al 9500, tras percatarse de que la kiosquera que había amenazado hacía casi dos meses se encontraba en la vereda, sacó de entre sus ropas un arma de fuego y realizó un disparo al aire, para intimidarla.
Román fue detenido, imputado y permaneció preso hasta este lunes. Tras ser condenado, recuperó la libertad con restricciones.