Durante la tarde-noche del domingo un adolescente, de 15 años, protagonizó un grave suceso cuando disparó a la cabeza de su expareja, una mujer de 28 años, que de manera providencial salvó su vida.
El hecho ocurrió en Iturraspe y el terraplén. La víctima se encuentra bien porque la bala no perforó el cráneo.
Durante la tarde-noche del domingo un adolescente, de 15 años, protagonizó un grave suceso cuando disparó a la cabeza de su expareja, una mujer de 28 años, que de manera providencial salvó su vida.
Del hecho se tuvo conocimiento cerca de las 18 cuando personal de la Seccional 6ta. recibió un alerta de la Central 911 dando cuenta de una persona herida de bala en la zona del terraplén e Iturraspe.
La información reportaba un menor herido de bala en el lugar. Sin embargo, al llegar, los vecinos informaron que la víctima era una mujer de 28 años, la que ya había sido trasladada al Hospital Cullen.
En el hospital, se entrevistó a la cuñada de la víctima, quien reveló que la joven de 28 años había sufrido heridas de bala en la parte frontal del cráneo, con entrada y salida del proyectil. Milagrosamente, el diagnóstico médico indicó que el proyectil no causó daño óseo significativo, aunque una parte de él quedó alojada en el cuerpo de la víctima.
Tras recibir tratamiento médico, la mujer fue trasladada a la dependencia policial, donde fue examinada por el médico forense de turno. Sin embargo, lo más sorprendente de este episodio fue que, a pesar de su terrible experiencia, la mujer optó por no presentar cargos contra su agresor, quien resultó ser un menor de tan solo 15 años.
No obstante agentes de la Policía Comunitaria procedieron a la aprehensión del menor de 15 años y al secuestro del arma de fuego involucrada en el incidente.
Ante esta situación, el caso tomó un giro inusual. El Juez de Menores en turno, Dr. Tredichi, determinó que, a pesar de la falta de denuncia por parte de la víctima, el adolescente sea identificado y enfrente cargos por "Tentativa de homicidio calificado".
Por su parte se comisionaron peritos para investigar los detalles del incidente y se remitió el arma de fuego, un revólver calibre 32, al área pericial de la AIC para su análisis.
Además, se realizó un dermotest en el menor y se procedió al secuestro de prendas de vestir como evidencia. En las próximas horas el involucrado deberá comparecer ante el Juzgado. A la vez todo lo acontecido fue notificado a la Subsecretaría de la Niñez.
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