Un hombre de 22 años continuará en prisión preventiva en el marco de una investigación penal en la que está imputado por haberle robado $800.000 al comprador de una moto en la ciudad de Santa Fe. Así fue resuelto por el camarista Fernando Gentile Bersano, luego de una audiencia de apelación que se desarrolló en los tribunales de la capital provincial.
La cautelar privativa de la libertad fue impuesta en primera instancia, y la defensa del hombre investigado –cuyas iniciales son MAQ– la apeló y solicitó medidas alternativas.
El fiscal Estanislao Giavedoni, quien está a cargo de la investigación, se opuso a la solicitud y pidió que se mantenga la prisión preventiva. En tal sentido, resaltó que "Gentile Bersano rechazó todos los agravios planteados por el abogado defensor y sostuvo que al ordenar la preventiva se 'realizó una correcta aplicación del régimen legal al caso concreto'".
Evidencias
El abogado defensor manifestó que las evidencias reunidas hasta el momento eran insuficientes para acreditar la probabilidad de que el imputado haya cometido el ilícito que se le atribuyó. Sin embargo, el fiscal Giavedoni se opuso y valoró que "el camarista consideró que los elementos que presentamos son idóneos para demostrar la participación en el hecho con el grado de certeza que demanda esta etapa procesal".
El fiscal Estanislao Giavedoni informó que la causa cuenta con un condenado, y que una mujer que firmó una probation. Crédito: Guillermo Di Salvatore
El juez Gentile Bersano afirmó en su resolución que "el plexo de evidencias luce sólido y no ha sido desvirtuado por las argumentaciones de la defensa", y observó que desde esa parte hubo "un análisis parcial y aislado de las evidencias".
En cuanto a los elementos que fundan la teoría del caso de la fiscalía, Giavedoni explicó que "el teléfono celular del imputado estaba en la zona en la que tuvo lugar el robo, al momento en el que ocurrió", y añadió que "ese dato objetivo se suma a la declaración de una testigo". A su vez, explicitó que "hay registros de telecomunicaciones entre la línea de la que es titular el hombre de 22 años y una persona a la que se investiga por la autoría ideológica".
Peligros procesales
La defensa planteó que la pena en expectativa no era necesariamente de cumplimiento efectivo, lo cual fue refutado por el fiscal Giavedoni en la audiencia. En tal sentido, Gentile Bersano también rechazó el planteo, en consonancia con lo dispuesto por el juez de primera instancia.
El fiscal señaló que "al imputado se lo investiga como autor material de robo calificado (por el uso de arma no habida), delito que cometió en el marco de una organización criminal". Al respecto, el camarista aseveró que "es evidente" que la escala punitiva de la figura delictiva impide otorgar la condicionalidad de la pena.
El juez Fernando Gentile Bersano integró el tribunal de la Cámara de Apelaciones que revisó el fallo de primera instancia. Crédito: Flavio Raina
Giavedoni recordó que "el hombre de 22 años además es investigado en otro legajo por haber participado en un homicidio". Tal circunstancia fue ponderada por el juez de segunda instancia, quien refirió que el imputado habría cometido el robo "a pesar de haber sido beneficiado con medidas alternativas en el marco de otro proceso".
Finalmente, el camarista desestimó un agravio vinculado a que los riesgos procesales de fuga y entorpecimiento probatorio constatados en primera instancia no eran tales. Expresó que "la modalidad de comisión del delito revela la extrema peligrosidad de las personas involucradas", y remarcó que "los testigos y víctimas deben ser preservados".
Armas de fuego
El representante del MPA aseguró que "quien continuará en prisión preventiva concretó el robo junto con un hombre de iniciales BAS que está imputado como coautor y cumple la misma cautelar".
"La víctima es un ciudadano de la localidad de Gálvez (departamento San Jerónimo) que, tras contactarse a través de una red social con un usuario que publicó una moto a la venta, fue citado para el lunes 10 de abril del año pasado en Carranza al 9.500", relató Giavedoni.
El fiscal expuso que "acompañado por dos mujeres, el comprador fue en auto al lugar a la hora acordada". Según detalló, "los imputados sorprendieron a las víctimas y les mostraron armas de fuego de puño que llevaban consigo".
"Los atacantes rompieron una ventanilla del vehículo y apuntaron un arma hacia la cabeza del conductor, al que luego golpearon con la culata", destacó. "Durante la situación violenta, les exigieron la entrega del dinero que tenían destinado al pago de la motocicleta y les dijeron que de lo contrario los iban a matar a los tres", puntualizó.
"Como resultado de la intimidación, los investigados se apropiaron ilegítimamente de un bolso con 800.000 pesos y le arrebataron un teléfono celular a una de las mujeres", indicó el fiscal.
Encubrimiento
Giavedoni precisó que "en el lugar del robo, quedaron una motocicleta utilizada por los imputados y el DNI de uno de ellos", y agregó que "otro hombre y una mujer fueron hasta allí para recuperarlos". En tal sentido, mencionó que "a estas otras dos personas se las investigó por el delito de encubrimiento".
"El hombre que se acercó a retirar el birrodado y el documento es identificado como Mirco Ezequiel Soria y fue condenado por esa conducta ilícita en un juicio de procedimientos abreviados", informó el fiscal. "Se le impusieron tres años de prisión efectiva y se le ordenó reparar económicamente a la víctima por 350.000 pesos", especificó.
"Por su parte, la mujer se sometió a una suspensión de juicio a prueba, a partir de lo cual le entregó a la víctima 300.000 pesos", concluyó.