Este jueves se reactivó el foco ígneo en la parte seca del embalsado que está estacionado en el margen Este de la laguna Setúbal.
Los bomberos debieron acudir al lugar en dos oportunidades. Cómo se originó.
Este jueves se reactivó el foco ígneo en la parte seca del embalsado que está estacionado en el margen Este de la laguna Setúbal.
El fuego se había registrado el miércoles por la mañana debajo de la costanera de la ciudad de Santa Fe, en la zona del paseo de los pescadores a pocos metros del faro.
Por lo que pudo saber El Litoral, este jueves hubo dos intervenciones de los bomberos zapadores de la capital provincial.
El primero de los reportes, indica que alrededor de las 8.30 el personal acudió al citado lugar y tras media hora de trabajo pudo extinguir el fuego. Sin embargo, cerca de las 11 volvieron a realizar tareas de apagado.
Fuentes consultadas indicaron a este medio que los focos se habrían originado de manera intencional y que no se descarta que esto esté vinculado a intentar limpiar el lugar.
Producto del repunte del río en los últimos días del verano y principios del otoño, vegetación acuática se acumuló en la laguna Setúbal, a la altura de los viejos pilares del ex puente ferroviario.
Una masa verde quedó detenida e impidió el paso por varias semanas, hasta que un grupo de navegantes particulares tomó cartas en el asunto e intentó abrir un paso.
Los esfuerzos fueron en vano, porque la naturaleza no cedió. Fue entonces que las autoridades provinciales convocaron a personal de pontoneros, que integran el Batallón de Ingenieros de Santo Tomé.
Los militares lograron despejar gran parte del bloque natural y la vegetación siguió su rumbo, río abajo. Sin embargo, alguna de las partes que conformaron el embalsado quedaron estacionadas en las márgenes de la Setúbal.
El Litoral dio cuenta que un sector de la flora acuática se congeló con las bajas temperaturas registradas en el invierno. Ahora, la novedad con este afamado embalsado es que tomó fuego, dos veces en una semana.