Robaba medidores de agua potable en Santo Tomé cuando fue sorprendido por la policía. Tras ser arrestado e imputado, decidió firmar un juicio abreviado reconociendo su responsabilidad en los hechos.
El hombre de 34 años decidió firmar un juicio abreviado, tras haber sido arrestado el fin de semana.
Robaba medidores de agua potable en Santo Tomé cuando fue sorprendido por la policía. Tras ser arrestado e imputado, decidió firmar un juicio abreviado reconociendo su responsabilidad en los hechos.
Se trata de Luciano Leonardo Lucero, de 34 años, quien fue condenado a dos años de prisión de cumplimiento efectivo como autor del delito de "robo reiterado en dos oportunidades".
La pena fue impuesta por el juez Nicolás Falkenberg en el marco de un juicio en el que se abreviaron los procedimientos. Los fiscales Rosana Peresín y Manuel Cecchini estuvieron a cargo de la investigación de los ilícitos y representaron al MPA en la audiencia del abreviado. El defensor público Mario Guedes representó a Lucero.
La condena impuesta surgió de la unificación con otra anterior por delitos contra la propiedad y por violencia de género, que data de enero de este año. "Ese antecedente era de ejecución condicional, por lo que se revocó la condicionalidad, se le impuso la pena única de dos años de efectiva ejecución y se dispuso su ingreso a dependencias del Servicio Penitenciario", señalaron desde la fiscalía.
El robo de los medidores de agua fue cometido el sábado 24 de enero en dos viviendas ubicadas en calle Belgrano al 1.200 y en Sargento Cabral al 1.900.
"El imputado se apoderó ilegítimamente de los dos medidores y se fue caminando del lugar", relataron los fiscales, "sin embargo, minutos más tarde fue aprehendido por personal de la sección Motorizada del Comando Radioeléctrico de Santo Tomé".
Peresín y Cecchini precisaron que "los agentes de la fuerza pública llegaron al lugar a raíz de llamados al 911 que hicieron vecinos, quienes advirtieron que el hombre investigado estaba sustrayendo los medidores".
En tal sentido, indicaron que "el imputado fue interceptado en inmediaciones de calle Chacabuco al 2.300 mientras caminaba en dirección al oeste con una bolsa blanca en la que llevaba los medidores robados minutos antes".
"A pesar de la presencia del personal policial, el condenado hizo una maniobra evasiva, logró escapar y se fue corriendo", explicaron los fiscales. "Finalmente, fue aprehendido nuevamente en la zona de cañadas, a unos 100 metros del puente de hierro de Santo Tomé", concluyeron Peresín y Cecchini.
Conformes
Las víctimas fueron notificadas y manifestaron su acuerdo con lo resuelto.