Elio Juan Miño tiene 45 años y el jueves 29 de junio protagonizó dentro de su vivienda un violento incidente que sólo por milagro no terminó en una gran tragedia familiar. Este hombre, que fue detenido por la policía poco después del episodio fue imputado días atrás por triple femicidio en grado de tentativa y este martes la Justicia le dictó la prisión preventiva, a pedido de la fiscalía y sin oposición de la defensa.
Se domiciliaba en calle República de Siria al 4200, donde la ciclovía que corta la ciudad de norte a sur ofrece un brazo hacia el este, a la altura de calle Iturraspe. Allí se desató el drama. Miño ya tenía denuncias previas por violencia de género. Esa noche, una discusión terminó abruptamente cuando él tomó un arma blanca y atacó.
Primero trató de apuñalar a su esposa, que corrió y logró refugiarse con otras dos personas dentro de una de las habitaciones de la casa.
Totalmente fuera de sí, el hombre arremetió entonces contra su propia nieta, de apenas 4 años. La pequeña sufrió varios cortes, pero quien llevó la peor parte fue su madre -hija del agresor- que se apresuró para echarse encima de la niña y cubrirla con su cuerpo. Su espalda terminó con varias puñaladas.
En medio del caos y el miedo, las tres víctimas escaparon a la carrera, pero antes de que la mayor alcanzara la vereda Miño la golpeó con sus puños y la acuchilló en el rostro y el cuello.
Atrincherado
Ya solo dentro de la vivienda y ante la llegada de los primeros patrulleros, Miño se atrincheró. Abrió el pico de una garrafa, prendió fuego y se clavó una aguja de tejer en el cuello.
El día que fue apresado y trasladado al Hospital Cullen.
"Las llamas no se propagaron por el lugar gracias a que personal de Bomberos controló el incendio y sacó de allí al agresor desvanecido", señaló la fiscalía.
Cautelar
Por el ataque a su expareja, a Miño se le endilgó la autoría de una tentativa de femicidio agravado por el vínculo. A su vez, en relación a los otros dos hechos violentos se le atribuyeron dos tentativas de femicidio vinculado, también agravado por el vínculo.
La medida cautelar fue dispuesta por el juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Sebastián Szeifert, en una audiencia que se desarrolló en los tribunales de la capital provincial.
La investigación está a cargo de la Unidad Fiscal Especial de Violencia de Género, Familiar y Sexual (Gefas) de la Fiscalía Regional 1, que solicitó la privación de la libertad.
"Debido a la gravedad de los delitos atribuidos y los riesgos procesales latentes, la medida cautelar no fue discutida por la Defensa (el doctor Héctor Acuña)", aclaró el MPA.
El magistrado consideró que estaban dadas las condiciones para imponer la preventiva y la ordenó sin plazo.
Historia violenta
Según aseguró la fiscalía, "las agresiones se enmarcaron en una violenta relación de pareja que el imputado comenzó hace 25 años con la mayor de las víctimas", y añadió que "al menos desde 2018, él maltrataba física y psicológicamente a las mujeres de la familia".
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