Jueves 14.12.2023
/Última actualización 22:56
La madrugada del lunes pasado, un hombre despertó sospechas en la cuadra de calle 25 de Mayo al 1700, en la zona céntrica de la ciudad de Santa Fe. No tomó demasiados recaudos como para pasar desapercibido. Hacía movimientos bruscos sobre la puerta de la Biblioteca Dr. Arturo Frondizi y cuando lo iluminaba algún automóvil que pasaba se corría y simulaba estar buscando algo dentro de bolsas de basura apiladas en la vereda. Así estuvo más de media hora, hasta que llegó al lugar una patrulla de la Brigada Motorizada. Vecinos habían llamado a la Central 911 para dar aviso de que algo extraño estaba sucediendo. Era un viejo conocido de los uniformados.
Rafael Osca Gómez tiene 48 años y es un hombre sin hogar. Vive en la calle y siempre al margen de la ley. Su prontuario es abultado. Tiene numerosos antecedentes penales condenatorios y fue declarado reincidente en ocho oportunidades.
Cuando lo sorprendieron los policías, ya había logrado arrancar con una sierra la tapa de metal del buzón de la puerta de la institución. Aparentemente, trataba de ampliar el agujero para poder meter la mano y abrir desde adentro.
Al ver a los agentes, trató de esconder la sierra que estaba utilizando para su "trabajo", pero la herramienta fue secuestrada.
Gómez fue aprehendido y trasladado a la Comisaría 1a, donde quedó a disposición del Ministerio Público de la Acusación.
El fiscal Daniel Filippi le imputó el delito de robo simple en grado de tentativa y este jueves solicitó que permanezca en prisión preventiva mientras avanza el proceso en su contra. El juez Leandro Lazzarini le dio la razón y desestimó el pedido de medidas alternativas sugeridas por la defensa, en manos del defensor oficial Javier César Casco.
Autoridades de la biblioteca manifestaron durante la audiencia de medidas cautelares que era al tercer hecho de inseguridad que sufrían en poco más de dos semanas.