El Tribunal de Audiencia de Santa Rosa que tuvo a su cargo el juicio por el crimen de Lucio Dupuy, el niño de 5 años asesinado en esa ciudad pampeana en noviembre de 2021, dictó este viernes la sentencia.
En horas del mediodía se conoció la sentencia de las acusadas, que ya habían sido encontradas culpables.
El Tribunal de Audiencia de Santa Rosa que tuvo a su cargo el juicio por el crimen de Lucio Dupuy, el niño de 5 años asesinado en esa ciudad pampeana en noviembre de 2021, dictó este viernes la sentencia.
Magdalena Espósito Valenti y Abigail Páez fueron condenadas a prisión perpetua. Según se puede leer en la sentencia:
“Condenar a Magdalena Espósito Valenti, de circunstancias personales ya referidas, a la pena de prisión perpetua con más la accesoria del artículo 12 del C.P., por la comisión del delito de homicidio triplemente calificado por el vínculo, alevosía y ensañamiento (artículos 80.1 y 80.2 del C.P.), por el que ya fue declarada autora penalmente responsable mediante interlocutorio de culpabilidad nº 3/2023, sin costas (artículos 346, 444 y 445 del C.P.P.)”
“Condenar a Abigail Páez, de circunstancias personales ya referidas, a la pena de prisión perpetua con más la accesoria del artículo 12 del C.P., por la comisión del delito de homicidio doblemente calificado por alevosía y ensañamiento, en concurso real con el delito de abuso sexual con acceso carnal por vía anal, ejecutado con un objeto fálico, agravado por tratarse de la guardadora y por haberse cometido contra un menor de 18 años de edad, aprovechando la situación de convivencia preexistente, 17 como delito continuado (artículos 80.2, 55, 119 primer y tercer párrafo e incisos b) y f) del cuarto párrafo y 55 –a contrario sensu-, ambos del C.P.), por el que ya fue declarada autora penalmente responsable mediante interlocutorio de culpabilidad n.º 3/2023, sin costas (artículos 346, 444 y 445 del C.P.P.)”
Ambas mujeres ya habían sido declaradas culpables del homicidio del niño y ahora el Tribunal de Audiencia de Santa Rosa, integrado por los jueces Alejandra Ongaro, Andrés Olié y Daniel Sáez Zamora, dio a conocer el monto de la pena y no hizo lugar al pedido de la familia de la víctima que había solicitado que se les aplique "el tiempo indeterminado" como accesoria a la prisión perpetua.
Tampoco se dio lugar al pedido de los abogados defensores, quienes habían pedido que se cuantifique la pena por entender que si se aplicase la prisión perpetua –con las normas vigentes hoy en el país– “solo saldrá de la cárcel con su muerte, ya que actualmente la pena perpetua es material y literalmente perpetua”. Además, la defensora oficial, Silvina Blanco Gómez, solicitó que esa cuantificación sea la mínima por la carencia de antecedentes penales y la edad de la imputada (28 años); y afirmó que la Corte Suprema ya fijó la inconstitucionalidad de la reclusión por tiempo indeterminado.
Por otro lado, el defensor oficial Pablo De Biasi, al hablar por Espósito Valenti, brindó argumentos similares y requirió que se le fije “una pena en años”, con lo que coincidió en que “la prisión perpetua que establece el Código Penal es inconstitucional”, ya que “los tratados internacionales impiden la aplicación de penas crueles, inhumanas y degradantes”.
Lucio Dupuy fue asesinado el 26 de noviembre de 2021 en la casa de la calle Allan Kardec al 2300 de Santa Rosa, donde vivía con su madre y su pareja.
Los movimientos de las condenadas y Lucio quedaron registrados por una cámara ubicada frente al departamento, y gracias a ellos se pudo concluir que a las 17.32 horas se lo vio a Lucio vivo por última vez. Consideraron acreditado los jueces que entre ese momento y las 19.40 horas, cuando ambas imputadas salieron solas del departamento, Lucio fue golpeado brutalmente.
Según los fundamentos del fallo, Páez llevó en moto a su novia al trabajo de moza en el restaurante de un hotel de la capital pampeana y regresó sola a las 20.49, cuando intentó reanimar al niño y lo metió, bajó la ducha. A las 21.30 salió con Lucio en brazos para el centro asistencial del barrio Río Atuel, anexo al departamento, pero estaba cerrado, por lo que fue derivado al Hospital Evita, donde a las 21.45 se constató que ya estaba muerto.
La Justicia estableció que las dos participaron de la golpiza mortal, entre las 18 y las 19 del 26 de noviembre, y que el niño recibió golpes de puño, patadas y golpes con un palo. También recibió un pisotón en la espalda por parte de Páez (se pudo determinar por la impronta que dejó su zapatilla), que le provocó lesiones internas como el desgarro del hígado y, además, fue mordido en sus zonas íntimas y en su brazo izquierdo.
El Tribunal de Audiencia, en la sentencia de 126 fojas, estableció que el niño fue víctima, recurrente, de violencia física, psicológica y sexual y determinó que se pudo advertir un “crescendo de violencia”, a la luz de los chats entre ambas imputadas, ventilados durante el juicio, a partir de mediados del mes de octubre de 2021.