El Tribunal de Disciplina del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal suspendió por un año la matrícula de la abogada Ana Rosenfeld, al considerar que incumplió con la premisa de resguardar el secreto profesional entre el letrado y su cliente cuando renunció a la defensa del actor Juan Darthés, imputado por violación, informaron fuentes vinculadas al caso.
De todas maneras, la abogada podrá seguir ejerciendo con el solo hecho de apelar la medida ante la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal, el tribunal de alzada del cuerpo que dispuso la sanción, añadieron los informantes.
"Se dispuso un año de suspensión de la matrícula de la doctora Rosenfeld por haber incumplido con el secreto profesional que debe haber entre cliente y abogado", precisaron.
Tras la apelación a la que podría acudir Rosenfeld, la Cámara puede confirmar la sanción, revocarla, imponer una multa u ordenar al Colegio que disponga otra medida, explicaron las fuentes.
Y destacaron que "el solo hecho de plantear la apelación tiene efectos suspensivos", por lo cual "podrá seguir ejerciendo al menos hasta que se expida la Cámara".
En el artículo 10 del Capítulo 3 del Código de Ética del CPACF, titulado "Deberes fundamentales inherentes al ejercicio de la abogacía", se indica que "el abogado debe respetar rigurosamente todo secreto profesional y oponerse ante los jueces u otra autoridad al relevamiento del secreto profesional, negándose a responder las preguntas que lo expongan a violarlo. Sólo queda exceptuado: a) Cuando el cliente así lo autorice; b) Si se tratare de su propia defensa".
Rosenfeld comenzó a defender a Darthés cuando el actor querelló a su colega Calu Rivero, quien lo acusó de supuesto acoso, pero renunció a seguir asistiéndolo al conocerse la denuncia que Thelma Fardín le planteó por presunta violación y dio explicaciones públicas.
"Cuando el tema cambió de título, de tenor, de perspectiva, y entramos en algo que por ahora está sospechado y denunciado pero no sentenciado. Yo tomé la decisión como mujer, de madre (de dejar de representar a Darthés); es el límite que toda la vida decidí tener. Yo no soy abogada penalista, como abogada civilista tengo la opción de decidir qué defender", dijo entonces a La Nación +.
Y en otro programa de TV comentó que "lo primero que hice fue llamarlo a Darthés y le dije que yo tenía un límite, que no voy a defender nunca a una persona sospechada, acusada ni denunciada de un delito de tal magnitud. Así que le presenté mi renuncia".