Durante la mañana del lunes, el gobernador de Misiones, Hugo Passalacqua, logró acordar un aumento salarial del 27% con el gremio docente, similar a lo ofrecido al sector policial con quienes la negociación no llegó a buen puerto.
El gobierno anunció este lunes un aumento salarial para el sector público. Sin embargo, el ofrecimiento no bastó para los policías que se encuentran acuartelados. Aseguran que están "al borde de una huelga policial en la provincia".
Durante la mañana del lunes, el gobernador de Misiones, Hugo Passalacqua, logró acordar un aumento salarial del 27% con el gremio docente, similar a lo ofrecido al sector policial con quienes la negociación no llegó a buen puerto.
Desde el viernes 17 de mayo, oficiales y suboficiales del Comando Radioeléctrico I de Posadas, llevan adelante un acuartelamiento en reclamo de una recomposición salarial que parece no llegar.
En diálogo con la prensa de Misiones, Ramón Amarilla, vocero policial, aseguró que “la propuesta que nos ha traído el Gobierno es irrisoria, no han mejorado nada ni hubo acuerdo. No va a haber acuerdo porque no hay voluntad en lo político de resolver esto”. Según trascendió, la oferta fue de 21% contra el 100% que reclaman los uniformados.
Asimismo, resaltó que “acá se viene algo muy grave, todos los sectores están reclamando y nosotros no somos la excepción. Es una vergüenza lo que nos vinieron a ofrecer, ni siquiera se asemeja a lo que necesita un policía para pasar la línea de pobreza”.
A la protesta de los uniformados se sumó parte del personal de salud de la provincia, quienes sacaron de circulación cinco ambulancias del servicio de emergencias 107 y las llevaron al acuartelamiento.
Además, aseguró que se encuentran “al borde de una huelga policial en la provincia. Nosotros no somos piqueteros, somos profesionales que nos preparamos para hacer el trabajo policial y penitenciario. Pero con estos sueldos de hambre, es imposible trabajar. Ya estamos jugados. La gente va agarrando más bronca y vamos a tener más acompañamiento. Acá tenemos más de 15 mil personas”.
Amarilla anticipó cuáles serán los próximos pasos en el conflicto: “Seguimos con el acampe y, lamentablemente, vamos a seguir hasta las últimas consecuencias”, y agregó que “las negociaciones siempre estuvieron cortadas, nosotros tuvimos que estar ochos días ahí para que nos atiendan. No hay voluntad política. Este gobernador, en su momento, también había destruído la mesa de diálogo. No quieren escuchar la verdad”.
Para finalizar, el vocero policial de Misiones descartó una posible fecha nueva de reunión: “Estamos esperando a que ellos tomen verdadera conciencia de esto. Se les planteó lo que podía suceder, porque acá hay muchos sectores que están viniendo, no solo la policía. Esto va a estar muy jodido”.