Uno de los llamados “trapitos” que se desempeña en la zona de boliches ubicado en el acceso a Alto Verde, habría quedado como principal sospechoso de ser quien apuñaló al joven Joaquín Lezcano (23).
Así surgió luego de la reunión que la fiscal mantuvo con la única testigo del suceso. También escuchó al padre y al hermano de la víctima.
Uno de los llamados “trapitos” que se desempeña en la zona de boliches ubicado en el acceso a Alto Verde, habría quedado como principal sospechoso de ser quien apuñaló al joven Joaquín Lezcano (23).
Esto surgió tras la reunión que durante la tarde del lunes mantuvo la fiscal del caso, doctora Ana Laura Gioria, con la única testigo del suceso.
Si bien en un primer momento (el día del hecho) la mujer brindó un testimonio algo impreciso, el correr de las horas le permitió ajustar su relato. Y en esta nueva declaración se habría apuntado a un “cuida-coches” como el supuesto agresor.
En el encuentro, realizado en dependencias del Ministerio de la Acusación, también estuvieron el padre y el hermano de la víctima, aunque solo a los efectos de interiorizarse del asunto, ya que ninguno de éstos presenció el incidente.
Así las cosas la fiscal dispuso que las actuaciones pasen a la PDI para que comiencen los trabajos investigativos.
Pesquisa difícil
Varios motivos presagian que la tarea de los pesquisas no será fácil respecto a la identificación del agresor.
Por ejemplo, vale señalar que en la zona donde se produjo el ataque no hay cámaras de seguridad.
También que en dicho sector son numerosos los individuos que se “ganan la moneda” como cuida-coches.
A su vez la escasa iluminación, como lo sorpresivo del ataque, suman a la falta de precisiones.
Atentos a estos detalles todo queda librado a lo que puedan aportar los ocasionales testigos del hecho. En este sentido la familia Lezcano reiteró que si alguien desea colaborar puede hacerlo de manera anónima, comunicándose con la seccional de policía más próxima.
Leve desmejoría
En tanto el estado de salud de Joaquín sigue siendo crítico y con riesgo de vida.
“El paciente continúa con asistencia respiratoria mecánica y en un coma inducido por drogas, para mantener la presión”, según consignó el subdirector del hospital Cullen, doctor Hernán Malatini.
A su vez el profesional precisó que “de ayer a hoy se produjo una leve desmejoría y está en estudio un posible cuadro infeccioso con fiebre”, cerró.
Madrugada de furia
Joaquín Lezcano fue apuñalado la mañana del domingo cuando se retiraba de un evento realizado en el complejo Camboriú (ex club Excursionistas), en el acceso a Alto Verde.
Algunas horas antes, el joven había arribado en el auto de un amigo. Distintas versiones dan cuenta que en dicha circunstancia discutió con un “trapito”, a quien le dijo que le daría la propina después.
Ya cerca de las 6 el joven se encontraba dentro del vehículo de una amiga cuando de repente alguien abrió la puerta y lo apuñaló en el pecho.
Pese a lo dramático de la situación la mujer tuvo la lucidez para poner en marcha el rodado y salir a toda velocidad en busca de auxilio. “Esta acción evitó que el joven muera en el lugar”, opinó un profesional de la salud.
Al cabo de unos minutos en pleno bulevar se hizo el transbordo del joven a una ambulancia que lo llevó finalmente hasta el hospital Cullen. A poco de ingresar el joven sufrió dos paros cardíacos.