Por amenazas, tentativas de hurto e incumplimiento de un mandato judicial fue condenada una santafesina de 25 años, quien admitió su responsabilidad en cada uno de los hechos.
La mujer admitió su responsabilidad en seis hechos delictivos ocurridos entre abril de 2023 y junio de este año.
Por amenazas, tentativas de hurto e incumplimiento de un mandato judicial fue condenada una santafesina de 25 años, quien admitió su responsabilidad en cada uno de los hechos.
El acuerdo abreviado fue homologado por la jueza Cecilia Labanca, quien condenó a Carina Andrea Guadalupe Zapata. El escrito fue presentado por los fiscales Rosana Peresín y Manuel Cecchini, y la defensora pública Magalí Mazza.
Zapata fue condenada a 1 año y 7 meses de prisión en suspenso, como autora de los delitos de “amenazas calificadas”, “incumplimiento de un mandato judicial”, dos “tentativas de hurto”y dos “tentativas de hurto calificado por escalamiento”. Los ilícitos ocurrieron entre abril de 2023 y junio de este año.
Previo a finalizar la audiencia, la jueza ordenó la libertad de la condenada y le impuso una serie de reglas de conducta.
La noche del 19 de abril del año pasado 2023, aproximadamente a las 23, Zapata se hizo presente en el domicilio de su hermano, ubicado en Pasaje Paraná y Pedro de Vega. Lo amenazó con un cuchillo Tramontina manifestándole “te voy a matar, dame los chicos”, fue reducida por una de sus hermanas y entregada a la policía.
Tres meses después, el 4 de julio de 2023, también por la noche, se hizo presente en inmediaciones de la intersección de calles Ricardo Aldao y Pasaje Paraná, cerca de la casa de su hermana.
De esta manera, incumplió la medida de distancia otorgada por el Tribunal Colegiado de Familia N°, 5 que disponía una medida de distancia recíproca a favor de su hermana y sus hijos, no pudiendo acercarse a los domicilios de cada uno, ni a sus personas, ni a sus hijos, ni al establecimiento educativo al que concurren, debiendo mantener una distancia no inferior a 100 metros.
Entre enero y junio de 2024 Zapata intentó cometer una serie de hurtos en distintas viviendas de la ciudad de Santa Fe.
El primero ocurrió el 13 de enero, cuando ingresó a una vivienda de Pedro de Vega al 4200, desde donde sustrajo un horno pizzero, una juguera, una procesadora, una bolsa con elementos de higiene varios y cañas de pescar, entre otros elementos. Los preparó en bolsas, con el fin de llevarlos de allí, pero no lo logró ya que fue sorprendida por la moradora y posteriormente aprehendida por personal policial comisionado al lugar.
La mañana del 24 de abril, aproximadamente a las 7, Zapata saltó una reja de unos 2 metros e ingresó al patio delantero de un domicilio de Lamadrid al 6700 . Una vez dentro, se hizo con un coche de bebé, un monopatín y un casco de moto. No logró concretar el hurto ya que fue divisada por la propietaria y retenida por transeúntes, luego de volver a saltar las rejas.
Un mes después, el 23 de mayo, en horas de la madrugada, Zapata ingresó -junto con un masculino de identidad aún desconocida- a una vivienda de calle Gaboto al 6600, previo trepar una reja de aproximadamente 2 metros de altura. Entre los dos, se apoderaron de una cama elástica circular de aproximadamente 3 metros de diámetro y 2,5 metros de altura, que se encontraba en el patio, así como de varias herramientas.
Una vez consumadas tales acciones, emprendieron la fuga con la cama elástica, dejando las herramientas mencionadas debajo de una camioneta estacionada frente al lugar del hecho. Momentos después, Zapata fue sorprendida por personal policial que había sido comisionado por la Central de Emergencias 911, tras el aviso de la víctima.
El último hecho data del 10 de junio. A las 13.30, Zapata ingresó a un taller mecánico de Estanislao Zeballos al 4300, y del interior de un automóvil marca Volkswagen Voyage sustrajo un equipo matero símil cuero de color marrón. Fue sorprendida por el propietario del taller cuando se disponía a darse a la fuga y terminó aprehendida.