Condenaron a un hombre por haber ingresado junto a otros dos a la vivienda de una anciana y robado rollos de cable y otros elementos que el hijo de ella guardaba allí. Ocurrió en pleno centro santafesino.
La sentencia también incluyó otro delito contra la propiedad y la portación de un arma de fuego.
Condenaron a un hombre por haber ingresado junto a otros dos a la vivienda de una anciana y robado rollos de cable y otros elementos que el hijo de ella guardaba allí. Ocurrió en pleno centro santafesino.
Se trata de Juan Carlos Kawecki, de 22 años, quien fue condenado a tres años y seis meses de prisión por la jueza Celeste Minniti. La sentencia surgió de la firma de un acuerdo de juicio abreviado.
El fiscal que llevó adelante la investigación es Arturo Haidar. Kawecki admitió su responsabilidad penal como coautor de “robo agravado por haber sido cometido en un lugar poblado y en banda y mediante efracción”, una “tentativa de robo simple” y la “portación ilegítima de un arma de fuego de guerra”.
El robo en grupo ocurrió el sábado 4 de mayo de este año, minutos antes de las 2 de la madrugada. Kawecki y otros dos hombres, Romero y Santiago Rubén Fiamaca -también condenados-, “actuaron de forma conjunta para apoderarse de bienes ajenos", afirmó la fiscalía.
Rompieron la cerradura y una de las hojas de vidrio del portón de entrada al garaje de una casa en la que vive una mujer de 94 años, ubicada en Gobernador Crespo al 3000, pleno centro de Santa Fe.
De allí robaron cuatro rollos de cable de 100 metros cada uno, dos sensores infrarrojos y una llave ajusta tuerca tipo 'L', pertenecientes al hijo de la víctima.
Si bien los delincuentes abandonaron rápidamente el domicilio, fueron sorprendidos en inmediaciones de Hipólito Irigoyen y San Lorenzo por agentes del Comando Radioeléctrico que habían sido alertados de lo ocurrido a través de la Central de Emergencias 911.
Corrieron hacia el oeste en un intento de lograr fugarse pero tras una breve persecución los tres fueron aprehendidos. Mientras huían, arrojaron dos bolsos que contenían los objetos robados, por lo que las víctimas pudieron recuperarlos.
Ese no fue el único hecho por el que Kawecki fue condenado. En otra oportunidad, intentó sustraer elementos que estaban dentro de un automóvil estacionado en el pasaje Falucho al 4200, en inmediaciones del Hospital de Niños Dr. Orlando Alassia.
Como el dueño del vehículo se percató de lo que estaba ocurriendo, el ladrón se dio a la fuga sin haber logrado apoderarse los objetos.
Por otro lado, Kawecki también contaba con una causa abierta porque fue aprehendido portando un revólver calibre .38 para lo cual no poseía la debida autorización legal. El mismo era apto para efectuar disparos y estaba cargado con 6 cartuchos.
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