Después de dos audiencias de inicio suspendidas, este jueves finalmente comenzó el juicio del “caso del preservativo”, el cual motivó el jury al exjuez penal Rodolfo Mingarini. En esta causa de abuso sexual, el consentimiento es el punto de mayor controversia, según adelantaron las partes durante sus alegatos de apertura.
El tribunal conformado por los jueces Nicolás Falkenberg -presidente-, Lisandro Aguirre y Sergio Carraro estará al frente del debate seguido contra Leandro Exequiel Spies (28).
Los fiscales Luciana Escobar Cello y Matías Broggi pretenden lograr una condena a 12 años de prisión por el delito de “abuso sexual con acceso carnal”, mientras que los defensores Julián Saín y Marcos Barceló apuestan a la absolución de culpa y cargo.
El hecho data de abril de 2021. Tras ser imputado, Spies quedó en libertad por decisión del exjuez Mingarini, quien en su resolución cuestionó cómo podría haber sometido a la mujer mientras se colocaba un preservativo. El video del recorte de la resolución se viralizó y el tema cobró relevancia nacional.
Mingarini fue denunciado y en septiembre de 2021 el Tribunal de Enjuiciamiento lo suspendió de su cargo. En mayo de 2022, tras el jury, fue destituido por mal desempeño de sus funciones en nueve casos, muchos de estos sobre abuso sexual con víctimas menores de edad.
La causa fue llevada a juicio por los fiscales Matías Broggi y Luciana Escobar Cello. Crédito: Flavio Raina
Cuestión de consentimiento
Al comienzo de su alocución, los fiscales sostuvieron que durante el debate los jueces “conocerán como Leandro Spies abusó” a la víctima el mediodía del 27 de abril de 2021.
La agresión ocurrió en el domicilio de ella, en el norte de la ciudad de Santa Fe, donde “Spies redujo a la víctima, neutralizando su resistencia”, enfatizaron, para luego violarla.
“Es necesario destacar que no se encuentra controvertida la fecha, el lugar, ni siquiera que existió un acto sexual entre ella y Spies”, dijo Broggi, “al tribunal le corresponderá decidir de modo prácticamente exclusivo sobre la falta de consentimiento de ella para la realización del acto abusivo al cual Spies la sometió”.
Como prueba, “podrán escuchar a la propia víctima”, a testigos, expertos y al personal policial que intervino en la investigación. Al finalizar, el fiscal reiteró su pedido de condena a 12 años de prisión.
“Siempre fue inocente”
“Leandro Spies tuvo una relación sexual plenamente consentida con la supuesta víctima”, comenzó sus alegatos el Dr. Saín. Dijo que eran vecinos y tenían “un trato prácticamente cotidiano”, y que ese día de abril “ella lo invitó a pasar a tener relaciones sexuales”.
Spies, a través de Zoom, y sus abogados defensores Julián Saín y Marcos Barceló. Crédito: Flavio Raina
Spies “es un chico trabajador, tiene familia e hijas chicas, y esto le ha destruido la vida. La supuesta víctima es una señora mayor, de 47 años”. Aquí “se va a demostrar que fue una relación consentida, aceptada y asentida por la señora. Spies siempre fue inocente”.
Teniendo en cuenta que el hecho se produjo en el interior de la habitación, sin testigos directos, el defensor también consideró que “el testimonio de la víctima va a ser esencial”.
“Tenemos que poner en contexto este juicio, máxime cuando debido a esta causa se produjo la destitución de un magistrado, algo que no tendría que haber ocurrido y Spies tendría que estar en libertad” y haber llegado así al juicio.
Por todo esto, la defensa solicitó la absolución de culpa y cargo. Al concluir los alegatos, comenzó la etapa de producción de la prueba.
Previo a la apertura del debate, se discutió sobre la participación del acusado en el juicio. En concreto, la defensa cuestionó que no estuviera presente en la sala, sino que lo hubieran conectado a través de Zoom desde una sala de la cárcel de Las Flores, donde se encuentra alojado: “Se le está dando trato de condenado cuando goza del principio de inocencia”, advirtieron.
El Director de la Oficina de Gestión Judicial de Primera Instancia, José Luis Longo, explicó ante el tribunal que el Servicio Penitenciario informó que por una nueva norma dejaría de trasladar a los presos hasta tribunales, a excepción de las audiencias de juicios abreviado y de lectura de veredicto.
A pesar de la queja de la defensa, el tribunal resolvió continuar el debate con el acusado a través de Zoom, y sostuvo que de esta forma se llevaron a cabo múltiples juicios, sobre todo durante la época de cuarentena.
Otro de los planteos previos giró en torno a la prensa. El tribunal puso a consideración de las partes la presencia de los periodistas en la sala, y solicitó a los funcionarios del MPA que consultaran el tema con la víctima.
Saín y Barceló se refirieron al principio de publicidad del proceso penal y sostuvieron que se trata de una causa de conocimiento e interés público. En la misma línea estuvo el planteo de los fiscales Luciana Escobar Cello y Matías Broggi, quienes también acordaron que se protegiera la declaración de la víctima.
Si bien la mujer, que debía prestar declaración en tan sólo una hora, señaló que en principio no tendría inconvenientes, a consideración de la fiscalía ella no estaba en condiciones ni había sido consultada adecuadamente al respecto. Por eso, el tribunal resolvió que el juicio se desarrollara a puertas abiertas hasta que la víctima declarara y fuera consultada nuevamente.
Finalmente, se resolvió que el juicio se desarrolle a puertas abiertas.