Un hombre quedó en prisión preventiva luego de que le atribuyeran haber agredido y amenazado a una pareja durante un mes y medio en la ciudad de Santa Fe.
La fiscalía sostuvo que el hombre mantuvo “una actitud de violencia persistente y premeditada” hacia los afectados. Las agresiones se prolongaron durante un mes y medio.
Un hombre quedó en prisión preventiva luego de que le atribuyeran haber agredido y amenazado a una pareja durante un mes y medio en la ciudad de Santa Fe.
La jueza de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Cecilia Labanca, dispuso la prisión preventiva de C.G.C., de 40 años, tras haber sido imputado por amenazas y lesiones cometidas contra una pareja en la ciudad de Santa Fe.
La medida fue solicitada por la fiscal Rosana Peresín, quien detalló que se habían acreditado suficientes elementos para aplicar la prisión preventiva, debido a los peligros procesales que podrían derivarse de la libertad del imputado.
La fiscal Peresín destacó la gravedad de los hechos y la necesidad de asegurar el curso de la investigación. "Los delitos de los que se le acusa son particularmente graves, y el riesgo de que continúe con la violencia o interfiera en el proceso es real", afirmó, y resaltó que el caso está siendo tratado con una especial atención, dado que se enmarca en un contexto de violencia de género.
La investigación abarca varios episodios de violencia ocurridos entre diciembre de 2024 y el 22 de enero de 2025, cuando finalmente se produjo la detención del acusado. El primer incidente documentado tuvo lugar el 5 de diciembre de 2024, alrededor de las 7:30 de la mañana.
Según el relato de la fiscal Peresín, CGC se acercó a la vivienda de la pareja, ubicada en el norte de la ciudad de Santa Fe, cuando la mujer y su pareja estaban saliendo del domicilio. En ese momento, CGC comenzó a amenazarlos de muerte, con el propósito de intimidarlos y evitar que continuaran con sus actividades cotidianas.
La fiscal también precisó que el acusado utilizó un lenguaje altamente agresivo y amenazante, lo que generó un profundo temor en las víctimas. El ataque verbal fue un claro intento de control sobre las víctimas, quienes se vieron obligados a ceder ante la presión del agresor para poder continuar con su día.
Sin embargo, el episodio de mayor violencia ocurrió el pasado lunes, 22 de enero de 2025. Aproximadamente a las 18:30, CGC se presentó nuevamente en la casa de las víctimas. En esta ocasión, las agresiones escalaron: el hombre no sólo repitió las amenazas, sino que, además, golpeó a la mujer en el rostro con su puño.
Este ataque físico se produjo en un contexto claramente identificado como violencia de género, pues el agresor no solo mostró agresividad verbal, sino que también recurrió a la fuerza física para intimidar a la mujer.
Ante la violencia de CGC, el otro hombre, que se encontraba con la mujer en ese momento, intervino para protegerla. Sin embargo, el imputado no dudó en agredir también a este hombre, propinándole golpes en varias partes de su cuerpo, incluidos el rostro, la pierna izquierda, la mano derecha y la región subcostal izquierda.
Las lesiones sufridas por la víctima fueron de menor gravedad, aunque igualmente representaron un peligro para su salud y seguridad.
El fiscal Peresín hizo especial hincapié en el contexto de violencia de género en el que ocurrieron los hechos. Subrayó que la agresión no sólo fue física, sino también psicológica, pues el comportamiento del imputado se enmarca dentro de un patrón de control y abuso hacia la mujer.
"La violencia de género no se limita a las agresiones físicas, sino que también involucra un control emocional y psicológico constante, que busca subyugar a las víctimas", afirmó Peresín.
A lo largo de la investigación, se recabaron testimonios que muestran el historial de amenazas y agresiones previas, lo que refuerza la acusación de que CGC ha mantenido una actitud de violencia persistente y premeditada hacia la pareja afectada.
A raíz de los hechos ocurridos y de la evidencia reunida, CGC fue imputado por los delitos de “amenazas simples” en dos ocasiones, cometidas en diciembre de 2024 y enero de 2025, y “lesiones leves dolosas en contexto de violencia de género” respecto de la mujer. Además, el hombre fue imputado por “lesiones leves dolosas” en relación con el otro hombre que intervino en defensa de la mujer.
Mientras el proceso judicial sigue su curso, las víctimas han sido incluidas en un programa de protección, y se les brindarán los apoyos necesarios para garantizar su seguridad.
Según fuentes del Ministerio Público de la Acusación (MPA), se está trabajando para brindarles un acompañamiento psicológico y jurídico a la mujer y al hombre agredido, para que puedan superar el impacto emocional que ha generado este violento episodio.
La fiscal Peresín se mostró optimista respecto al avance de la investigación, y destacó que se seguirán tomando todas las medidas necesarias para garantizar la justicia en este caso. "Los agresores deben saber que sus actos tendrán consecuencias, y que el sistema judicial está dispuesto a actuar con firmeza", concluyó la fiscal.