El trágico choque de lanchas ocurrido la noche del 7 de diciembre a la salida de la fiesta “Malibú”, celebrada en la isla “La Paciencia”, sobre el río Paraná, ocasionó la muerte de Adrián Javier Taborda y dejó lesionadas a las siete personas que estaban con él.
Pedro Agustín Bertossi,de 35 años, fue imputado por el fiscal Arturo Haidar por los delitos de "homicidio culposo por la conducción antirreglamentaria, imprudente y negligente de un vehículo con motor" y "lesiones leves culposas".
El 16 de diciembre, la jueza Celeste Minniti dispuso que Bertossi permanezca en prisión preventiva mientras la investigación judicial avanza.
Mauro Centis, quien iba en la embarcación “Anita” junto a Taborda cuando fueron embestidos, cuestionó que Bertossi esté alojado en Prefectura en lugar de en una cárcel o comisaría. Además, denunció que “tiene determinados privilegios o alguna influencia, nos llegaron comentarios de que hace videollamadas con los amigos”.
Minniti ordenó la prisión sin plazos para Bertossi. Foto: Guillermo Di Salvatore
“Nosotros estamos todos con terapia individual, e hicimos terapia grupal que nos brindó la Provincia”, señaló Centis, que conocía a la víctima fatal desde los 12 años. “La que peor está es la madre de Adrián, vamos a intentar pagarle la terapia entre todos porque la otra parte no se hace cargo de nada y queremos que ella esté bien”.
“Intentos de agravar la situación”
Consultado por El Litoral, el abogado defensor Ignacio Alfonso Garrone informó que las víctimas plantearon ante la Justicia el traslado de Bertossi de Prefectura a un penal y que ésto fue rechazado por improcedente. Se debe a que es el Servicio Penitenciario el que decide los lugares de alojamiento.
El Dr. Alfonso Garrone asumió la defensa. Foto: Guillermo Di Salvatore
Para Alfonso Garrone “esto es parte de una escalada de mensajes, exigencias y pretensiones que tenemos documentados y vamos a denunciar” durante la audiencia de apelación.
Se trata de “pretensiones que no estamos dispuestos a cumplir, que generan estos intentos de agravar la situación” de Bertossi.
Después de una fiesta
El sábado 7 de diciembre se realizó una edición de la conocida fiesta "Malibú" en la isla "La Paciencia", a dónde acudieron decenas de embarcaciones. Esa noche, en el kilómetro 585 del río Paraná, la celebración se convirtió en tragedia.
Ocho personas emprendían la vuelta a Santa Fe a bordo de la lancha "Anita" cuando fueron embestidas por otra embarcación, de nombre "Samira", que chocó contra el lado izquierdo, donde estaba sentado Taborda. La proa impactó de lleno al hombre, causándole fractura de cráneo, politraumatismo intercostal y aplastamiento de tórax.
Tres de los tripulantes de "Samira", que iban sentados en la parte delantera de la lancha, cayeron al agua. Mientras volvían a subir, escucharon a los tripulantes de "Anita" gritando que habían matado a alguien. Así lo describió el fiscal, recordando las declaraciones de los involucrados.
La embarcación que timoneaba Bertossi fue secuestrada.
Quienes estaban con Taborda tomaron fotografías y videos de "Samira" y luego se alejaron, procurando llegar rápido a la guardería náutica para conseguir asistencia médica. Al llegar, lo subieron a un auto y lo trasladaron hasta el Hospital Cullen, donde momentos más tarde Taborda falleció.
"Infracción en el maniobrar"
Al momento de resolver la prisión preventiva, la jueza Minniti destacó que los tripulantes de "Anita" sí tenían buena visibilidad, mientras que los de "Samira" no, porque llevaban consigo una linterna de largo alcance.
"Las lanchas tienen luces como baliza", pero los primeros llevaban un instrumento que les permitía ver más. Es por eso que se percataron de que "Samira" iba a chocarlos e intentaron, en vano, hacerle señas para que los esquivara.
Allí es donde se ve "la falta de cuidado en la eficaz vigilancia visual y auditiva que debía tener el conductor de 'Samira'". Si Bertossi estaba manejando en condiciones desfavorables, debería haber tomado recaudos, no sólo respecto a la visibilidad, ya que además iba a "una velocidad inadecuada para la cantidad de personas que llevaba y la nocturnidad".
Como timonel, acreditado para manejar lanchas, Bertossi "podía controlar cuántas personas llevaba" -iban 11 y tenía capacidad para 6-, así como las condiciones en las que iba a conducir.
Por eso para la jueza existió una "infracción en el maniobrar diligente", ya que no sólo no tomó las precauciones debidas sino que éstas lo llevaron a que la lancha "fuera difícil de controlar", y a "no poder ver más allá de la propia proa".
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.