Especialistas en toxicología y expertos en adicciones coinciden en que la gran mayoría de las veces los adulterantes que se le agregan a las drogas suelen ser más peligrosos que la sustancia psicoactiva en sí misma. Esta idea recrudeció tras conocerse el caso de Milagros Alanis Moyano, la joven marplatense que murió en Palma de Mallorca luego de consumir una pastilla de éxtasis y que sus familiares denunciaran que el comprimido habría sido adulterado con veneno para ratas. ¿Pero se suele usar raticida en este caso?
El doctor Carlos Damín, jefe del Servicio de Toxicología del Hospital Fernández y presidente de Fundartox, indicó que “es poco probable que un comprimido de éxtasis esté adulterado con veneno para ratas, que pertenece al grupo químico de los superwarfarínicos, y produce una muerte muy lenta y a largo plazo”.
En el caso del éxtasis o el MDMA, los adulterantes más frecuentes tanto en el país como en España “son los del grupo de las catinonas, que son más de 20, tienen un efecto similar al éxtasis, pero pueden producir cuadros muchos más graves al momento de la ingesta”. Este agregado debe ser incorporado por el mismo productor que prensa el comprimido y lo usa porque estas sustancias “producen un efecto similar, pero a un costo más barato”.
Tenés que leerUna marplatense murió en España tras consumir éxtasis y denuncian que la pastilla tenía veneno para ratasDistinto, según Damín, es adulterar un polvo como la cocaína. “En este caso el veneno para ratas que también es un polvo blanco se emplea para generar más volumen, porque la droga se vende por peso. En cambio, un comprimido como el de éxtasis no va a valer más o menos por ser más grande o más chico”.
Por su parte el doctor Sergio Saracco, médico toxicólogo y Director del Observatorio de Salud Pública y Problemáticas de Consumo de la Universidad Nacional de Cuyo explicó que ‘los raticidas no producen hipertermia, que es uno de los efectos esperables del éxtasis dependiendo siempre de la cantidad ingerida de la droga, la hidratación de quien la consume y cuestiones genéticas-‘. Detalló que el veneno para ratas es un anticoagulante que nada tiene que ver con este cuadro.
Por último, el doctor Eduardo Kalina, Máster en Adicciones y Profesor Titular del Posgrado en Adicciones de la Universidad del Salvador, indicó que “desde 2017 en Estados Unidos empezó a usarse un veneno para ratas con efectos anticoagulantes, de nombre brodificaum, como aditamento de los llamados cannabinoides sintéticos, entre ellos el Black Mamba, el K2 y el Spice”.
“Promocionan este veneno como agregado para ’experiencia diferente’, algo que el adicto persigue ya que se siente atraído por los productos peligrosos, al punto de volverse un cobayo con el que experimentan. Pero son los aditamentos los que más muertes provocan y salen versiones de estas drogas todo el tiempo, que son especialmente peligrosas cuando se las mezcla con alcohol”, concluyó.
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