La viralización de un video en redes sociales en la que se muestra a dos supuestos hinchas del club Bella Vista intimidando con armas a la hinchada de All Boys previamente a un partido de la Liga Cordobesa de Fútbol (LCF), generó el reproche de las autoridades, que investigarán a los responsables.
El encuentro de la Segunda categoría del fútbol local que se disputó el sábado en la cancha de Bella Vista terminó con peleas, durante el fin de semana en el que se permitió la vuelta de los hinchas (250).
El presidente del Consejo de Seguridad Deportiva Provincial (Cosedepro), Marcelo Frossasco, afirmó en la tarde del lunes: "Vamos a ser inflexibles con estos hechos de violencia e implacables ante actitudes intimidatorias de individuos marginales por lo que propugnaremos ante la Justicia la más severa de las medidas”.
En las imágenes difundidas durante la jornada de hoy, se observa a dos personas con sus rostros cubiertos, que además de manifestar amenazas esgrimen un arma de fuego y balas.
“Córdoba tiene en materia de seguridad deportiva una política de Estado reconocida en el país. Hemos podido realizar encuentros multitudinarios con ambas parcialidades sin ningún tipo de incidentes", consideró Frossaco.
El funcionario resaltó además: "Seremos custodios de ese logro colectivo alcanzado por el Estado, dirigentes, jugadores, parcialidades y comunicadores sociales, porque concebimos la seguridad como una construcción colectiva que no puede ser empañada por el accionar de sujetos marginales cuyo único destino debe ser la cárcel”.
En otro escenario, en la cancha de Las Palmas, el encargado de prensa de Argentino Peñarol, Francisco Bolletta, denunció que fue agredido por dirigentes del club local cuando intentaba filmar los incidentes que se desarrollaban en la tribuna entre hinchas locales y allegados visitantes.
"Vinieron dos miembros del Club Atlético Las Palmas, me agarraron de atrás y me empezaron a pegar mientras gritaban 'sacale la cámara'. Por suerte un directivo de Argentino Peñarol estaba cerca mío y pudo tomar la cámara y otro empleado del club llegó para separar", dijo Bolletta.