El juez penal de Santa Fe, Jorge Patrizi, ordenó la prisión preventiva sin plazo para Brian Exequiel Espósito (26), acusado de golpear a un pequeño de 2 años que se encontraba internado en el Hospital Iturraspe con un cuadro de convulsión febril y a cuyo cuidado se encontraba a cargo.
La medida cautelar de encierro fue dispuesta este jueves por la mañana en una audiencia celebrada en la Sala 7 del subsuelo de tribunales, en el que la defensora pública oficial, Mónica Echañiz, propuso como alternativa, la internación de su pupilo en un granja para el tratamiento de adicciones en la provincial de Córdoba.
Dicha propuesta fue rechazada por la fiscal de la Unidad de Violencia de Género, Familiar y Sexual (Gefas) del MPA, Milagros Parodi, quien previamente había desplegado una serie de argumentos para lograr que Espósito transite el proceso tras las rejas.
La Dra Parodi relató que Lucas L. de tan sólo 2 años, fue ingresado al Hospital Iturraspe con un cuadro de "convulsión febril" el sábado 21 de mayo "para tratamiento y diagnóstico". Al día siguiente -domingo 22- su madre se retiró del nosocomio para atender a sus otros tres hijos, una de ellas una beba de 11 meses a la que está amamantando y dejó al pequeño en compañía de su actual pareja.
En horas de la noche la llamaron del hospital para contarle que Espósito había sido detenido.
Video clave
De las evidencias reunidas hasta el momento, se pudo conocer que el acusado estaba en pareja con la madre del niño víctima desde hacía apenas 10 meses, período en el cual tanto ella como sus hijos habrían recibido agresiones en un contexto de violencia intrafamiliar y de género.
También hizo mención la fiscal a la existencia de una testigo presencial del hecho que es motivo de análisis, la cual logró registrar la cruda escena que fue reflejada en varios medios, con la cámara de su teléfono celular. La mujer se encontraba en la cama de al lado, al cuidado de su hijo que también se encontraba hospitalizado y tomó la decisión de filmarlo, escandalizada por la inusitada violencia del padrastro.
El hecho en sí se produjo en horas de la tarde del domingo 22 de mayo, en la cama 17 de la habitación 5 del pabellón "D" de Pediatría del efector público ubicado en el norte de la ciudad.
Golpes con la mano abierta, zamarreos, tirones de pelo y arrastres en la cama fueron descriptos por la representante del MPA para que el juez del caso tuviera real dimensión de los sucedido, a pesar de haber quedado enmarcado en un caso de "lesiones leves".
"Hey, hey, te estoy mirando, no quiero que te levantes; te quedás quieto", se escucha decir a Espósito contra el pequeño indefenso.
Otras lesiones
Además, como resultado del examen médico, la profesional que atendió al pequeño detectó lesiones recientes, que se condicen con lo que refleja el video, pero también de larga data, por lo que no se descarta ampliar la investigación acerca de si el niño y sus hermanitos eran víctimas de violencia previa.
A la hora de evaluar una posible pena por la agresión al niño y dos amenazas previas a su ex suegra -producto de otra relación de pareja-, la fiscalía adelantó que "no vamos a admitir que sea condicional", dada la "inusitada violencia en relación al último de los hechos".
Allí destacó "la vulnerabilidad de la víctima: se está ante un caso de maltrato infantil manifiesto", expresó. "Es difícil de imaginar una relación más desigual de poder", dijo la Dra Parodi al referirse al hombre frente al "niño que usa pañales". Pero además, remarcó que dicha desigualdad "subyace respecto de su ex pareja". "Espósito es un hombre violento", definió.
"Merece reproche"
La defensora Echañiz por su parte, no cuestionó la materialidad del hecho que quedó registrado en cámara de video. "Entendemos que el accionar de Espósito merece reproche y hasta podemos calificarlo de aberrante porque la situación de poder es evidente". Y si bien priorizó el "interés superior del niño" en ese caso, sí rebatió los dos hechos de amenazas anteriores, dirigidos contra una ex suegra, de una relación anterior a la actual que lo vincula a Espósito.
"El hecho fue imputado un año y medio después" criticó y advirtió que no se hicieron los informes pertinentes a los fines de identificar si las cuentas y perfiles de Facebook utilizados para proferir las amenazas eran realmente de su defendido.
En ese sentido adelantó su criterio de que en caso de ser condenado podría caberle una pena de ejecución condicional y negó la existencia de riesgo de entorpecimiento probatorio ni fuga por parte de su pupilo.
Adicciones de fondo
A propósito de los motivos que habrían llevado a Espósito a golpear a la criatura, la clave la aportó la madre del detenido quien "confirma que el señor Espósito tiene graves problemas de adicciones. Ahí sí esta defensa puede entender el por qué de su actuar", manifestó la Dra. Echañiz.
En tal sentido ofreció como alternativa a la prisión preventiva su internación en una granja de la ONG Remar en la provincial de Córdoba, con un tratamiento aconsejable de 18 meses, que "es un tiempo aún mayor del establecido para la pena de lesiones", dijo. Además, propuso que una vez concluido dicho tratamiento, realice otro sobre control de ira, para así intentar reencausar su vida.
La fiscalía se opuso a las alternativas y el magistrado optó por ordenar la preventiva sin atenuantes. "Estamos hablando de una persona que es violenta y no le interesa una convivencia pacífica", dijo el juez Patrizi. "No solamente ha tenido problemas con sus ex parejas, sino con su núcleo familiar", en referencia a la ex suegra en un caso y ahora un hijo de su pareja de 2 años.
Y agregó: "golpear a un niño internado nos está dando la pauta de que tiene un grave problema de violencia" y agregó que "evaluar la prisión en firme" es una manera de "hacer cesar la conducta de esta persona".