"Esto fue una 'entregada'"; la horrible sospecha del dueño del Pago Fácil robado
El comerciante asegura que los ladrones tuvieron acceso a información "muy fina" del lugar. "Esto no lo hace cualquiera... acá hubo gente profesional", dijo.
"Esto no lo hace cualquiera... es de película. Es algo profesional. Fue una 'entregada'..., no se me ocurre otra cosa. Tenés que tener mucha cabeza para hacer algo así", afirma con contundencia Luis, uno de los titulares del Pago Fácil que fue blanco de un millonario robo durante este fin de semana, en diálogo con El Litoral.
A 48 horas de este resonante golpe todavía nada se sabe sobre quienes fueron los que sustrajeron cerca de 40 millones de pesos y dejaron otros 6 millones abandonados dentro del local ubicado en la esquina de 9 de Julio y Mendoza.
En medio de la conmoción el comerciante narró a El Litoral cómo fueron los últimos movimientos del negocio hasta "la bomba" que estalló el domingo.
Alarma activada
"La última vez que pasó el camión de caudales fue el jueves después del mediodía. Se llevaron la recaudación del miércoles. Nosotros tuvimos después tres días de trabajo. Jueves todo el día, viernes todo el día y el sábado normal, de 9 a 14 horas.
El domingo a la mañana tipo 10,30 decidí venir al local para ver cómo estaba todo. Apenas entro estaba el televisor prendido y me pareció raro. Después veo las luces del pasillo encendidas y ahí descubro el desastre que había en el depósito.
El sistema de alarmas estaba totalmente activado. Cuando ingreso, como siempre ocurre, me toman los sensores de la parte del kiosco y tuve que poner la clave para que no suene. Estaba perfectamente activado. El último registro fue el sábado a las 14,06 que fue cuando se cerró la puerta del negocio.
Otro de los "boquetes" que hicieron los ladrones.
Encapuchados
En otra parte Luis reveló las características de los ladrones y el lugar por donde se cree treparon hasta llegar a su comercio.
"Esta gente conocía el terreno, eso es seguro. Creo que entraron por la cochera del vecino, la que está ubicada unos metros hacia el sur por calle 9 de Julio. Desde allí treparon y se trasladaron por los techos hasta llegar al mío. Cortaron la chapa, luego hicieron varios boquetes en el cielorraso hasta que le dio la altura donde podían bajar.
Lo que los vecinos me comentaron es que vieron un auto blanco sin patente, con 3 personas vestidas de negro, con guantes y encapuchados. Yo no me explico cómo fue que si vieron algo así no llamaron a la policía. La verdad es que hay cosas que me cuestan comprender. El mismo vecino me dijo que vio bajando individuos por una de las columnas que está en la cochera. Es algo increíble. Después de eso los tipos se fueron. No sé si había otro más que los estaba esperando en el auto.
Yo sé que a las 6,39 de la mañana del domingo llamaron al 911, pero fue por un aviso de ruidos molestos.
Así quedó la cerradura de la caja fuerte.
Tres horas de "trabajo"
Más adelante el comerciante sostuvo que "esto no lo hace cualquiera... es de película. Es algo profesional. Fue una 'entregada'..., no se me ocurre otra cosa. Tenés que tener mucha cabeza para hacer algo así".
"Por lo que nosotros pudimos ver en nuestras cámaras, las luces del pasillo se prendieron a las 3,40 de la madrugada. A esa hora entraron. Después tuvieron todo el tiempo para hacer el trabajo que hicieron. Y antes de las 7 de la mañana del domingo se fueron. Es decir que estuvieron 3 horas acá adentro. Con amoladoras cortaron chapas, rompieron el cielorraso, buscaron el lugar para bajar. Vinieron con sogas. Esto fue trabajo de profesionales", reiteró.
A modo de cierre el comerciante lanzó: "lo único que le digo a la gente es que se cuide... porque lo que está pasando es cada vez peor", sentenció.
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