Una acalorada discusión se transformó en una pelea a puños entre dos hombres en la ciudad de Santa Fe este jueves. El hecho se dio a metros de la peatonal santafesina y quedó registrado en un video.
El hecho se dio en calle Juan de Garay a metros de San Martín en el centro de la ciudad de Santa Fe.
Una acalorada discusión se transformó en una pelea a puños entre dos hombres en la ciudad de Santa Fe este jueves. El hecho se dio a metros de la peatonal santafesina y quedó registrado en un video.
Sobre la vereda de Juan de Garay, a metros de la peatonal San Martín en la ciudad de Santa Fe, dos trapitos terminaron a las piñas tras una discusión.
En el video se puede ver cómo otras personas que pasaban por el lugar intentan separarlos pero sin éxito.
Luego de varios segundos donde se quedaron agarrados pegándose, se separaron pero volvieron a buscarse para continuar la pelea.
Desde mediados de mayo, los “trapitos” comenzaron a ser controlados y retirados de las calles de la ciudad para que no ejerzan esa labor informal, ya que comenzó a regir la prohibición aprobada por el Concejo de la ciudad, a pedido del Ejecutivo, sobre esta actividad en la vía pública.
En primer lugar, el foco se hizo en el macrocentro y particularmente en la zona donde rige el Sistema de Estacionamiento Ordenado Municipal (SEOM).
En la tarea de controlar que no haya cuidacoches en la vía pública, se sabe que hay un protocolo de actuación, que básicamente consta de tres pasos: uno, el inspector municipal estará con el binomio policial. El agente municipal, que no tiene poder de policía, se acercará al cuidacoches y lo instará a que se retire del lugar (porque está prohibido cuidar coches).
Dos: si el cuidacoches se resiste a abandonar su lugar, podrá intervenir el efectivo policial, para exhortarlo nuevamente a que desista en su posición.
Tres: como se trabajará también con la Policía, si la situación no se modifica y el cuidacoches se sigue negando a irse, éste podría ser detenido y retirado por las fuerzas del orden público, dado que estará infringiendo La Ley de Faltas y Convivencia provincial.
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