“No fue una tragedia de milagro”, con esa frase describió un santafesino una inesperada secuencia ocurrida pasada la medianoche de este Viernes Santo en una estación de servicio.
Ocurrió en la expendedora ubicada en General Paz y Javier de la Rosa. Un motociclista lo redujo hasta que llegó la policía.
“No fue una tragedia de milagro”, con esa frase describió un santafesino una inesperada secuencia ocurrida pasada la medianoche de este Viernes Santo en una estación de servicio.
Todo ocurrió en la expendedora de combustible ubicada en General Paz y Javier de la Rosa, en barrio Guadalupe a tan solo 250 metros de la Basílica y a 100 metros de la Seccional 8va, cuando un hombre tomó una manguera de los surtidores y empezó a arrojar nafta.
Ante la atónita mirada de los presentes, este sujeto amenazaba con sacar un encendedor y prender fuego. La situación no pasó a mayores gracias al accionar de un motociclista que estaba en la estación y logró reducir al individuo.
Otro cliente del lugar fue quien compartió las imágenes con El Litoral a través del WhatsApp del diario y relató de primera mano lo ocurrido. En la filmación se puede ver el líquido inflamable desparramado por el piso del lugar.
“Quiso prender fuego la estación, una locura total”, así arrancó el entrevistado su testimonio. Y sumó: “Yo llegaba a cargar nafta y este ‘personaje’ sacó la manguera y empezó a revolear nafta para todos lados. En ese momento había un muchacho en moto y lo redujo hasta que llegó la policía, que demoró 15 minutos estando a 100 metros”.
Al ser consultado por este diario, el testigo de lo ocurrido comentó que el sujeto “amagaba a sacar un encendedor, no fue una tragedia de milagro”. Y aseguró: “El muchacho estaba tomando alcohol etílico y parecía drogado”.
Por último, el entrevistado agregó que, según los empleados del comercio, no es la primera vez que este individuo genera problemas en la zona. La tensión terminó cuando finalmente llegó la policía y detuvo al problemático hombre.
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