Danilo Chiapello | dchiapello@ellitoral.com
Un matrimonio fue golpeado y maniatado. También su hijo, de 22 años. Les llevaron dinero, objetos y fugaron en el auto de las víctimas.
Danilo Chiapello | dchiapello@ellitoral.com
Momentos de terror vivió una familia santotomesina a manos de varios delincuentes que se les ganó en el interior de su domicilio, en un grave suceso acontecido en la madrugada del domingo.
Fue poco antes de las 5 cuando los desconocidos (serían tres hombres) ingresaron a un inmueble ubicado en Laprida al 2000, esto es, en pleno centro de la vecina ciudad y a escasa distancia de la Municipalidad.
Los intrusos sorprendieron a los ocupantes de la casa (un hombre de 65 años y su esposa de 57) entregados al sueño, por lo que en cuestión de segundos tomaron el control del lugar.
De acuerdo con las primeras versiones, los malvivientes actuaron con los rostros semicubiertos, serían de mediana edad, y uno de ellos dejaba ver que tenía un arma de fuego.
Si bien ambos esposos quedaron presos de esta pesadilla, los rufianes dirigieron sus acciones contra el hombre, a quien lo hostigaron con malos tratos y frases amenazantes para que revele el lugar donde guardaba dinero.
Como parte de esta faena, las víctimas fueron maniatadas y encerradas.
Y poco después, se produjo un evento inesperado cuando, en medio del robo, llegó a la casa el hijo del matrimonio, un joven de 22 años, que había estado en la ciudad de Santa Fe.
Ni bien ingresó a su casa el muchacho se topó con los malvivientes quienes lo redujeron y lo llevaron junto a sus padres.
A partir de entonces, los delincuentes requisaron toda la vivienda provocando un gran desorden. En esa tarea, se hicieron de un considerable botín, compuesto por dinero (en billetes de moneda nacional y dólares), además de elementos de informática y una Play Station.
Para evitar cualquier llamado a la policía, las víctimas fueron despojadas además de sus teléfonos celulares.
Por último, y para “coronar” su incursión, los delincuentes cargaron todo en el vehículo de la familia (un Fiat Uno de color gris), rodado en el cual se dieron a la fuga.
Poco después, personal policial llegó a la escena y debió prestar especial contención al dueño de casa quien, debido a la tensión sufrida, padeció una severa descompensación.
Atento a esta situación los uniformados trasladaron al hombre hasta un centro sanitario donde debió ser asistido.
El caso quedó en manos de agentes de la Policía de Investigaciones, quienes ahora procuran dar con los delincuentes toda vez que se realizan intensos rastrillajes en Santa Fe y en Santo Tomé, con el objetivo de ubicar el automóvil robado.